Los funcionarios de prisiones empiezan una ronda de reuniones con los partidos políticos de cara al 28A. Quieren tener el compromiso público de todas la formaciones para solucionar sus demandas.
Una huelga y varios meses de reclamaciones. El CSIF (Central Sindical Independiente y de Funcionarios) de Ceuta, junto con la Junta de Personal Admistración General del Estado, quiere hablar con todos los partidos de la derecha para garantizar que después de las elecciones sus reivindicaciones lleguen a buen puerto. Hoy ha tocado el turno con Vox, y con los candidatos se ha firmado un compromiso de traspasar las demandas a las Cámaras legislativas.
¿Cuáles son sus demandas?
En primer lugar, que se considera la prisión de Ceuta como insular, para poder tener su propia relación de puestos de funcionarios (R.P.T) y su propio equipo directivo. Esto, consideran los presos que les aliviaría la carga de trabajo.
Consideran que no tienen suficiente personal, y que por eso se generan situaciones anómalas (que rozan la ilegalidad), como que las estancias de aislamiento penitenciario (muy criticadas por organizaciones pro derechos humanos) no se utilicen.
El Gobierno no actúa
Los funcionarios de prisiones consiguieron que los senadores del PP por Ceuta, Guillermo Martínez y Fatima Mohamed, preguntaran por sus quejas. La respuesta, por escrito, del Gobierno fue que existían «importantes motivos para plantear y acometer el cambio de categoría». Pero ahora denuncian que no ha habido más respuestas ni acciones por parte del Gobierno.
De hecho, los trabajadores penitenciarios llegaron a plantear al ministro de Fomento, José Luis Ábalos, sus reivindicaciones, aprovechando la visita que hizo en Ceuta hace pocas semanas.