SATSE se ha congratulado por la Ley de Seguridad del Paciente, que se ha aprobado en el congreso y que «podría convertir a España en el primer país europeo y uno de los primeros del mundo en garantizar la seguridad en la atención sanitaria»
El Pleno del Congreso de los Diputados ha tomado en consideración la Ley que, para SATSE, «podría convertir a España en el primer país europeo y uno de los primeros del mundo en garantizar la seguridad en la atención sanitaria a los pacientes y al conjunto de la ciudadanía a través de una asignación máxima de pacientes por cada enfermera o enfermero en los hospitales, centros de salud y otros centros sanitarios y sociosanitarios».
Tras su debate ayer en el Pleno de la Cámara Baja, la Ley de Seguridad del Paciente, impulsada por el Sindicato de Enfermería, SATSE, ha obtenido el respaldo mayoritario de los grupos políticos para ser tomada en consideración y continuar así su tramitación parlamentaria en la Comisión de Sanidad, abriendo un espacio de presentación de enmiendas con la intención de consensuar y aportar mejoras al texto de la norma.
Una vez conocido el resultado de la votación, SATSE ha mostrado su gran satisfacción porque «el empeño y esfuerzo realizado por cientos de miles de personas» haya permitido el debate de la norma en el Congreso y ha querido agradecer a los grupos políticos su respaldo para que esta ley, «la primera de sus características en la historia de la sanidad española,» pueda seguir su tramitación parlamentaria y convertirse en realidad en próximos meses.
“El paso dado en el Pleno del Congreso demuestra que profesionales sanitarios, representantes políticos y ciudadanía buscan el mismo objetivo de mejorar y reforzar nuestro sistema sanitario, garantizando por ley que cualquier persona, independientemente de la comunidad autónoma en la que resida o de si acude a un centro público o privado, recibirá unos cuidados y una atención sanitaria mejor y más segura. Los pacientes y ciudadanos en general serán los más beneficiados al ser los que más necesitan estas garantías”, apunta SATSE
La norma tomada en consideración, explica SATSE, establece unas líneas claras mínimas para que los pacientes dispongan de un número suficiente y adecuado de enfermeras y enfermeros en todos los hospitales, centros de salud o centros sociosanitarios, «evitando así que el actual deficit estructural de plantillas que existe en nuestro país pueda seguir perjudicando la atención que reciben los pacientes y ciudadanía y que provoca, incluso, más fallecimientos, como constatan numerosos estudios nacionales e internacionales».
En concreto, y en lo que respecta a los hospitales, la Ley de Seguridad del Paciente establece que se asigne un máximo de seis-ocho pacientes por cada enfermera, y en el caso de los centros de salud, la asignación de población por cada enfermera o enfermero no deberá superar nunca los 1.500 habitantes. «La realidad actual es que en muchos de nuestros hospitales hay entre 15 y 20 pacientes por cada enfermera, y en los centros de salud, la asignación de pacientes por enfermera/o es de entre 1.600 y 2.000 personas», recuerda SATSE.
“Se trata de una norma necesaria, justa e igualitaria que beneficia a todos y todas, y de manera especial a los pacientes, que responde también al compromiso consensuado por los partidos políticos en la Comisión para la Reconstrucción Social y Economía de nuestro país de mejorar y reforzar el Sistema Nacional de Salud a través de una dotación adecuada de las plantillas de enfermeras y enfermeros”, señala el sindicato.
Al respecto, la organización sindical recuerda que España tiene una ratio de cinco enfermeras/os por 1.000 habitantes, mientras que la media en la UE es de casi nueve enfermeras/os por 1.000 habitantes, lo que le sitúa en el “farolillo rojo” en todos los análisis y estudios, habiendo, además, países que superan las 15 y 17 enfermeras/os por 1.000 habitantes.
La Ley Seguridad del Paciente entró en el Congreso de los Diputados como una Iniciativa Legislativa Popular una vez que logró el pasado año cerca de 700.000 firmas de ciudadanos y profesionales sanitarios, además de contar con el apoyo de organizaciones de pacientes y usuarios, personalidades de la sociedad española (comunicación, cultura, deporte…) y asociaciones enfermeras de todo el mundo.