El Consejo de Ministros de Interior y Asuntos Exteriores de la Unión Europea (JAI) ha debatido este martes la posibilidad que países “de primera entrada” como España, Grecia o Italia. Marlaska ha defendido ante sus homólogos que “España ya ha demostrado ser solidaria”.
La propuesta ha llegado a la reunión con buen pie, puesto que ha estado secundada previamente por Alemania, Francia, Malta e Italia. El ministro del Interior español, Fernando Grande-Marlaska, ha enfatizado los «principios de solidaridad» entre estados, para que los que no reciben a personas vía marítima se ofrezcan para su «reubicación». Estas algunas veces tienen en cuenta motivos de reunificación familiar.
Las personas migradas a las que España enviaría a otros países son aquellas que tienen admitida a trámite su solicitud de asilo. En España, más del 70% de las peticiones son rechazadas.
Marlaska defiende el papel de España en el control migratorio
Marlaska ha defendido ante sus homólogos que «España ya ha demostrado ser solidaria». Y ha esgrimido el control de las fronteras de Ceuta y de Melilla, así como los rescates en el Mediterráneo y el refuerzo de la cooperación con los países de origen y tránsito como prueba de ello.
Esta «cooperación» ha generado, cerca de nuestra ciudad autónoma, «una represión» según denuncian las ONG y las personas migrantes que están sobre terrreno. El jefe del control fronterizo marroquí, Khalid Zerouali, ha reconocido que las regiones cercanas a Ceuta y a Melilla están vetadas para las personas migrantes, sobretodo de origen subsahariano.
Una activista en Marruecos relataba a El Foro de Ceuta que la represión de la policía marroquí hacia los jóvenes que no consiguieron saltar la valla el pasado día 30 fue tan dura que muchos decidieron esconderte en ciudades más al sur del reino alauita. Este periódico ha contactado con personas que de forma aleatoria han sido deportadas a la fuerza de Tánger y Tetuan en múltiples ocasiones. Hace dos semanas un joven guineano moría como resultado de una actuación policial en la zona de Nador.
Siguen las muertes en el mar
Y aunque mínimo se han contabilizado 269 muertes o desapariciones en la ruta mediterránea hacia España este 2019 (un millar en todo el mar), el Gobierno socialista presume de la reducción numérica de personas que han llegado ilegalmente por la frontera sur al Estado. La lógica que argumenta apunta que a menos intentos de migrar, menos muertes.
Los datos no contemplan lo qué pueda pasarle a las personas que no alcanzan Europa en los países de tránsito. Y en este sentido, Marlaska apuntaba este martes en la cumbre que «debemos invertir más en este ámbito y coordinarnos mejor y de manera más positiva con los países de origen y tránsito».
Si el presupuesto de Frontex, la Agencia para la gestión de la cooperación en las fronteras exteriores de la UE, se ha multiplicado de forma exponencial estos últimos años, ahora la JAI apuesta por una sofisticación de la Europol. Concretamente, se propone la creación de «un laboratorio de innovación en el seno» de la organización. El ministerio del Interior ha afirmado que la intención es «posicionar a la agencia como centro de vanguardia e innovación en materia de seguridad».
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