El ministro de Salud de Marruecos, Amine Tahraoui, confirmó que el sarampión, conocido localmente como “Bouhmaron”, ha vuelto a convertirse en un grave desafío sanitario, tanto a nivel global como en el país, debido a la disminución de las tasas de vacunación en los últimos años.
Durante su intervención en la Cámara de Representantes este lunes, Tahraoui explicó que el sarampión es una enfermedad viral altamente contagiosa, ya que una persona infectada puede transmitirla a entre 18 y 20 personas de su entorno. Además, puede provocar complicaciones severas que incluso pueden llevar a la muerte.
El brote de sarampión en Marruecos comenzó a finales de 2023 en la región de Souss-Massa, extendiéndose posteriormente a áreas vecinas como Marrakech-Safi y, más tarde, a diversas partes del país. Según las cifras proporcionadas por el Ministerio de Salud, desde octubre de 2023 se han registrado 19.515 casos de sarampión, lo que representa una tasa de incidencia de 52,2 casos por cada 100.000 habitantes. Hasta el momento, el número de fallecimientos atribuibles a complicaciones del sarampión asciende a 107, con una tasa de mortalidad del 0,55%. Más de la mitad de las muertes corresponden a niños menores de 12 años, lo que pone de manifiesto la urgencia de reforzar la vacunación como medida preventiva esencial.
Tahraoui señaló que la disminución de la cobertura de vacunación, particularmente tras la pandemia de COVID-19, es la principal causa del resurgimiento de esta enfermedad en el país. En respuesta, el gobierno ha diseñado un plan nacional integral para combatir el sarampión y garantizar una mayor cobertura sanitaria.
Un plan nacional para detener el brote
El ministro detalló que la estrategia del gobierno incluye reforzar la vacunación rutinaria, con el objetivo de alcanzar una cobertura del 95% en los grupos objetivo mediante la administración de dos dosis de la vacuna contra el sarampión. Asimismo, se llevarán a cabo campañas de vacunación específicas para niños que no completaron su pauta de vacunación, especialmente aquellos nacidos entre 2020 y 2023.
El plan también contempla la creación de un sistema de vigilancia epidemiológica para detectar casos de manera temprana y coordinar respuestas rápidas. Además, se activará el Centro Nacional de Operaciones de Emergencia de Salud Pública junto con 12 centros regionales para gestionar la crisis sanitaria.
Campaña nacional de vacunación
El gobierno marroquí lanzará una campaña nacional de vacunación. Esta iniciativa, desarrollada en coordinación con los ministerios de Educación y del Interior, tiene como objetivo verificar y completar el estado de vacunación de todos los niños menores de 18 años. La campaña se extenderá por un periodo inicial de cuatro semanas, que podría prolongarse según las necesidades.
“Este plan refuerza nuestro compromiso con la protección de la salud pública y la erradicación de enfermedades prevenibles mediante la vacunación”, subrayó Tahraoui, quien hizo un llamado a las familias marroquíes para que participen activamente en estas iniciativas y aseguren la vacunación de sus hijos.
El sarampión, que ha resurgido como una preocupación global, representa ahora un desafío sanitario crítico en Marruecos. El éxito de las estrategias gubernamentales dependerá del apoyo colectivo y de la implementación efectiva de las medidas propuestas.