Marruecos está dando pasos firmes para posicionarse como un actor clave en la industria aeronáutica mundial. Con una estrategia que apunta a ampliar su capacidad y competitividad, el país norteafricano proyecta duplicar su producción y aumentar el empleo en el sector de cara a 2030.
El ministro de Industria y Comercio, Riad Mazour, ha destacado el objetivo de Marruecos de convertirse en un «socio fiable» y una «plataforma regional» para el desarrollo de la aviación. Durante el reciente Marrakech Air Show, Mazour subrayó que el país ya es capaz de fabricar diversas piezas y componentes aeronáuticos, con la ambición de avanzar hacia el desarrollo completo de un avión.
Khaled Safir, director general del Fondo de Depósito y Gestión, también elogió el crecimiento del sector durante el evento, describiéndolo como «una verdadera historia de éxito, resultado de una visión compartida y un esfuerzo colectivo». Según Safir, Marruecos ha generado más de 20.000 empleos en la industria y ha logrado una tasa de integración superior al 40%.
Además, Safir resaltó que Marruecos se ha consolidado como «un destino más competitivo en costes para las industrias de alta tecnología», lo que lo convierte en un polo atractivo para inversiones internacionales en el sector aeronáutico.
Con este impulso, el régimen de Mohamed VI busca afianzar su posición en la industria global y fortalecer la economía nacional a través de la innovación y la generación de empleo.