Más de 1.000 muertes en las fronteras españolas desde 2018 hasta el primer cuatrimestre de 2019. Es decir, más de 1000 muertes en 16 meses, lo que deja una media de más de 60 muertes diarias de personas cuyo único «delito» es el de tratar de prosperar en la vida. Del total de personas desaparecidas en altamar (presumiblemente ahogadas) solo se han recuperado unos 200 cuerpos, un escaso 25%.
Una canción del rapero Nega contiene la siguiente frase en uno de sus versos: «Otro migrante que muere en el más estricto olvido«. La canción data del año 2012, pero desgraciadamente la sentencia sigue muy vigente en 2019 -y no ha perdido vigencia en ninguno de los años que transcurren entre las dos fechas-. Prácticamente a diario, se conocen nuevos casos de embarcaciones que naufragan o se pierden a la deriva en las costas del Mediterráneo. Para colmo de males, una nube de polémica se cierne sobre Salvamento Marítimo y las nuevas directrices de colaboración entre el Gobierno español y el marroquí.
Caminando Fronteras, APDHA e Iridia
En muchas ocasiones, quien pone voz y da visibilidad a estos casos es la periodista y experta en migraciones, Helena Maleno, que es además portavoz de la organización Caminando Fronteras (Walking Borders). En unas declaraciones de Maleno, recogidas por el medio digital Público, la activista asegura que «Ya no hace falta actuar para que mueran como se hizo en El Tarajal. Ahora simplemente les dejamos morir» en relación a las nuevas políticas migratorias adoptas por la Unión Europea y, por tanto, por España.
Otras organización que hace las veces de «centinela» del Estrecho de Gibraltar es la La Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (APDHA). Es precisamente esta ONG la que ha denunciado recientemente, junto al Centro para la Defensa de los Derechos Humanos (Irídia) la nueva estrategia de rescate en el mar del Gobierno español, que, según lamentan, pasa por la “dejación irresponsable” del deber de salvamento de pateras a Marruecos en zona SAR (Search And Rescue) marroquí, incrementa el número de muertes en la Frontera Sur.
Denuncia de APDHA e Irídia
Esta denuncia, esta motivada por la última gota que ha colmado el vaso de la vergüenza: 22 personas perdieron su vida en el mar de Alborán el pasado 18 de junio. 22 personas que no recibieron rescate ni ayuda a pesar de conocerse su situación de riesgo por una llamada de socorro.
Según explican ambas ONG, hasta hace pocos meses, Salvamento Marítimo realizaba rescates tanto en zona SAR española como en zona SAR marroquí, en la que actuaba sólo bajo autorización de Marruecos con el objetivo de socorrer las vidas humanas en situación de peligro. Sin embargo, actualmente, y bajo las directrices del General de la Guardia Civil del Mando Único y siguiendo la nueva estrategia del Gobierno español, tan sólo realiza rescates en zona SAR española y común. Ahora únicamente acude al rescate de pateras una vez han sido efectivamente localizadas en el mar, por lo que ya no se realizan rastreos ni en el mar de Alborán ni en el Estrecho.
¿Salvar vidas o «proteger» fronteras?
Debido a este cambio en las políticas migratorias del Estado español, tanto APDHA como Irídia reclaman «que se vuelva a priorizar el rescate de personas sobre cualquier otro interés y para ello, que se recuperen los protocolos anteriores en los que Salvamento Marítimo podía acceder a zona SAR marroquí en el caso de que la Marina Royale no asumiera el rescate y las personas se encontraran en riesgo de muerte. Además, exigimos que se permita a Salvamento Marítimo realizar la aproximación a la zona, antes de que sea localizada la patera por coordenadas, reduciendo así los tiempos de rescate».
Igualmente, denuncian «que cuando la prioridad pasa de salvar vidas a impedir que lleguen personas a las costas del Estado español, se produce un aumento exponencial de las muertes de seres humanos que migran por la Frontera Sur y, concretamente, en el Mar de Alborán y el Estrecho. Esto es lo que ha ocurrido al asumir el reparto de competencias en el rescate de vidas humanas según zonas SAR española o marroquí».
Sigamos a Jesucristo para salvar vidas