Carlos Mazón, presidente de la Generalitat Valenciana, delegó sus funciones durante tres horas en plena emergencia por la DANA para asistir a un almuerzo político como líder del Partido Popular. La decisión ha generado críticas, especialmente desde la oposición, que cuestiona sus prioridades en un momento de crisis meteorológica.
El pasado miércoles, mientras la Comunidad Valenciana afrontaba los estragos de una DANA que dejó intensas lluvias, cortes de tráfico y alertas meteorológicas activadas en varias provincias, Carlos Mazón dejó temporalmente su cargo como presidente de la Generalitat. Según fuentes oficiales, delegó sus funciones en la vicepresidenta del Consell, Susana Camarero, para acudir a un almuerzo con cargos del Partido Popular en su rol de líder autonómico de la formación.
La interrupción de su responsabilidad como máximo representante del gobierno autonómico, aunque ajustada a la normativa, ha generado polémica. Desde la oposición, líderes como Sandra Gómez, portavoz del PSPV-PSOE, han señalado que «en plena emergencia, Mazón debería estar al frente de la coordinación de los esfuerzos y no priorizando agendas partidistas».
Por su parte, desde el Partido Popular justificaron la ausencia argumentando que el almuerzo estaba programado desde hacía semanas y que Mazón continuó monitoreando la situación a través de informes constantes. «La delegación temporal no afectó en absoluto a la gestión de la emergencia», indicaron fuentes cercanas al presidente.
La situación durante la DANA
Durante el periodo en que Mazón dejó sus funciones, las fuertes lluvias continuaron afectando la región. Municipios como Gandía y Oliva registraron acumulaciones de agua significativas, mientras se activaron dispositivos especiales para atender emergencias relacionadas con inundaciones y cortes de energía.
La vicepresidenta Susana Camarero asumió el liderazgo de la Generalitat en ese lapso y coordinó las tareas junto a Protección Civil y los cuerpos de seguridad. Según informes oficiales, las decisiones operativas no se vieron afectadas por la ausencia de Mazón.
Críticas y debate político
El incidente ha reavivado el debate sobre la compatibilidad entre las funciones institucionales y los roles políticos de los líderes autonómicos. «No se trata solo de cumplir con la ley, sino de la percepción que transmite un dirigente en momentos de crisis», afirmó un analista político.
Por su parte, Mazón respondió a las críticas asegurando que «la gestión de la DANA ha sido ejemplar y coordinada en todo momento», y destacó el trabajo del equipo de la Generalitat. Sin embargo, evitó confirmar si este tipo de delegaciones podrían repetirse en futuras emergencias.
La polémica continúa en el ámbito político y social, con opiniones divididas sobre la prioridad que deben dar los líderes autonómicos a sus responsabilidades institucionales frente a sus compromisos partidistas.