Desde el Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía (MDyC) aseguran estar hondamente preocupados por «la nefasta gestión que tanto la administración local, como la estatal, están realizando de los procesos de contratación, cuyo resultado están sufriendo los y las trabajadoras de los adjudicatarios en primer lugar y en segundo lugar la ciudadanía en la falta de unos servicios de calidad».
Para el MDyC ya son «demasiados los casos de adjudicaciones que se demoran en el tiempo«. Demoras que los localistas atribuyen a «incapacidad» de gestión en ambas administraciones y tachan de «excusas» las quejas del Gobierno de la Ciudad sobre la Ley de Contratación. Además, acusan al Gobierno de Vivas de ser el que «ha provocado la reducción de la plantilla de la administración local, la elevación de la temporalidad de los trabajadores municipales, el nepotismo en la cobertura de plazas o la negativa a sacar una Relación de Puestos de Trabajo«.
El MDyC señala la falta de personal como el principal problema
Los de Hamed apuntan que «el departamento de contratación tiene en la actualidad un tercio de la plantilla de la que sería necesaria para tener al día la totalidad de los contratos de la administración local, por ello se produce un embudo que impide que se puedan ejecutar los expedientes en sus plazos». Asimismo, el MDyC advierte que «sin profesionales que puedan sacar los procedimientos de contratación adelante es imposible que se salgan a concurso».
La contratación estatal padece «otra problemática»
El MDyC entiende que el principal problema en la contratación estatal es «la solvencia de los adjudicatarios, pero que igualmente repercute en primero lugar sobre los y las trabajadoras, y luego sobre la ciudadanía. Es por ello que vemos necesario que se tomen medidas para evitar que solo el precio sea la única variable de valoración de los contratos y se tengan más en cuenta la localización de la empresa en nuestra ciudad y su solvencia técnica y financiera, que evite casos tan graves como los que estamos observando en nuestra Ciudad».
Finalmente, el MDyC quiere mostrar su «solidaridad con los y las trabajadores que ven retrasados o directamente no cobran sus nóminas y exigir tanto a la administración local como a la estatal que se ocupen de una vez de solventar estos graves problemas, que pueden darse soluciones transitorias y urgentes dentro de la legalidad, pero que para eso debe existir una voluntad política y una capacidad técnica que no vemos en quienes solo tienen el interés de repartirse los cargos públicos como si fueran canonjías».