La segunda mesa de las primeras Jornadas de prevención del odio en las redes sociales Estrecho de Gibraltar organizadas por la Fundación Márgenes y Vínculos en Ceuta estuvo compuesta por dos representantes de Fakali, la Federación de asociaciones de mujeres gitanas; Julio Basurco, politólogo y profesor-tutor de la UNED Ceuta; Daniel Álvarez Ferrandiz, profesor de la Universidad de Granada, y Jesús Tomillero, presidente de la asociación Roja Directa y del Observatorio contra la LGTBIfobia del Campo de Gibraltar; han sido los ponentes en esta mesa
¿Cómo se esta posicionado el pueblo gitano en el siglo XXI en las redes sociales?, pues según los dos representantes, parte del equipo de comunicación de la Federación de Asociaciones de Mujeres Gitanas (FAKALI) en su intervención a través de la plataforma Zoom, han analizado como las redes han supuesto una «reconfiguración que afecta a las personas», donde «se ha superado el esquema tradicional de la comunicación, ahora hay capacidad de feedback, hemos pasado de ser consumidores a ser prosumidores, generamos información de manera inmediata, por diferentes canales y vías». Desde el colectivo han denunciado que cuando se «googlea ‘gitano’ se ve cuál es al imagen y discurso entorno a la ciudadanía gitana en las redes sociales y por extensión en la realidad».
La asociación se encarga, entre otras cosas, de detectar contenido antigitano en las redes, «la realidad es que las redes sociales están presentes en los incidentes físicos reales, sirven de plataforma para avivar el odio y para movilizar a una comunidad en contra de otra», han asegurado.
El profesor de la Universidad de Granada, Daniel Álvarez Ferrandiz, ha abordado las TICS, la adicción a las redes sociales, el ciberbullying y la conexión con los discursos de odio, que suponen el «miedo a lo que es la diversidad, que engloba no solo a personas de otra raza o sexo, proviene de la psique humana».
Por su parte, el presidente de la organización Roja Directa LBTBI, Jesús Tomillero, primer arbitro gay de Europa ha hecho una apelación a la denuncia: «los delitos de odio hay que denunciarlos, hay que denunciar, hay que acompañar a denunciar estos delitos de odio y no dejar impune estos delitos de odio».
«La principal medicina es la formación en las escuelas, centros deportivos y las administraciones públicas, hace falta una unión de la ciudadanía y la política, para poder legislar». Además, ha recordado el teléfono 028 que es una asesoría judicial y psicológica.
Basurco: “Hay que sentir odio hacia la intolerancia”
El politólogo ha comenzado preguntándose si ¿debemos cercenar la libertad de expresión para combatir el odio?: «Creo que no, porque es asumir el marco del enemigo. Quieren meternos en la cárcel a todos, creo que existe una corriente punitivista de la que yo me revelo, no hay que solucionar los problemas sociales aplicando el código penal”.
Basurco ha apuntado que “la libertad de prensa es el derecho a ofender, su defensa tiene sentido porque a alguien le molesta”.
“Cuando escucho a los representantes de Vox en la asamblea siento odio, desprecio, hacia lo que son, hacia su discurso y a lo que representan, son un colectivo que se merece todo el odio del mundo, y no quiero que por decirlo me acusen de estar cometiendo un delito de odio”.
Para el politólogo: “la lucha contra el odio debe ser puramente política, el camino es el fomento de la cultura, de la lucha pública, política y mediática”.