En absoluto me siento un idiota “entitulado” en un marco cutre y plastificado. ¿Seguro? NO. ¡Qué más da si (es)tiré mi infancia tragando esa mierda santa todas las semanas! Durante esa época, más de uno se llevó una ostia… merecida o no. Aún hoy, la cabeza se me llena de disparates mientras observo a las abuelas agachar la cabeza en la puerta de la iglesia al pasar frente a unos africanos [deducido porque son negros] que alzan su mano con la palma abierta hacia arriba solicitando la misericordia de los feligreses. Diezmo.
¿Renta básica universal? ¡Deberían llamarla renta de la delincuencia! Afirma el tertuliano de turno. ¡Van a convertir nuestra tierra en un país de vagAbund(i)os! ¿Quién duda que los migrantes se aprovecharan de esto y que, además, comen perros y creen en los marcianos? Verdad contra(s)tada.
La propaganda política no es, ni mucho menos un fenómeno novedoso. ¿Para qué detener las bromas pesadas y las fake news con sanciones ejemplares? Son entretenidas y atraen a la audiencia. ¿Cómo comprobar si un inmigrante (ilegal) africano es gay? ¡Sencillo! Encerradlo en una habitación con el presidente del gobierno español, si se lanza sobre él es “más maricón que un palomo cojo”. ¡Es tan guapo! Disciplina, por f(p)avor. Verdades el(n)a(r)bor(l)adas. ¿Por quién? Por ese periodismo que no morirá.
Explot(r)ación de fuentes públicas; las acuíferas y las institucionales. ¡Europa se burló de nosotros a través de su retórica y las denominadas armas pacíficas! -Esgrime parte de la bancada. ¡La piel de los inmigrantes debe ser vendida al por mayor! ¿Una cazadora paisa? Mejor un bolso para mi señora, que hoy celebra su menstruación.
Continúo confinado en los suburbios de lo políticamente correcto. Al igual que el resto de desahuciados por una sociedad que no es la s(t)uya [te hace sentir mejor pensar esta estupidez]. Esas (sor)presas fáciles para los criminales [de guante blanco y negro] y (neo)apologistas del saber no constatado. Co(r)tejo de contrabandistas.
¡Muerte a todos los (super)héroes! El último superviviente fue aplastado por un muro de lonsdaleíta [un supercristal más duro que el diamante]. La superrealidad es divertida e ineficaz por definición… ¡Siempre me gustaron los “m(p)alotes”! Me susurran al oído. ¿Por qué no aceptar el sexo duro como pasatiempo entre amigos ocasionales? No hay moros en la costa…