Los sindicatos CC.OO. y CSIF han denunciado un motín ocurrido el pasado viernes en el centro de protección de menores de Melilla, donde una treintena de menores protagonizaron un violento altercado para exigir dinero como regalo por la festividad del final de Ramadán. El incidente dejó varios trabajadores heridos y requirió la intervención de la Guardia Civil para controlar la situación.
Según los sindicatos, los menores habían recibido prendas de ropa como obsequio con motivo del fin del Ramadán, celebrado este lunes. Sin embargo, exigieron a los trabajadores del centro de acogida un pago de 10 euros por persona, demanda que fue rechazada por el personal. La negativa desencadenó una reacción violenta por parte de los menores, quienes agredieron físicamente a varios cuidadores y vigilantes, algunos de los cuales necesitaron atención médica de urgencia.
CC.OO. y CSIF han destacado la gravedad de este nuevo episodio de violencia en el centro, subrayando el riesgo al que se enfrentan diariamente los trabajadores. “Podría haber acabado en una tragedia, como ocurrió recientemente en Extremadura con otra compañera”, declaró CSIF, que denunció agresiones físicas y verbales, amenazas con armas blancas y diversas lesiones.
Durante el motín, los menores bloquearon el acceso al centro y lanzaron piedras y objetos contundentes, reteniendo a los trabajadores de primera acogida. Los vigilantes tuvieron que evacuar al responsable de Dirección, quien fue amenazado de muerte y acudió posteriormente a la Guardia Civil para denunciar los hechos. Aunque la intervención del instituto armado logró dispersar a los implicados, persistieron las amenazas e insultos hacia el personal.
CSIF ha expresado su indignación ante la decisión de la Consejería de Políticas Sociales y Salud Pública de Melilla de entregar finalmente el dinero reclamado por los menores, una medida adoptada en contra de la opinión del equipo técnico, educativo y auxiliar del centro. “Se ha sentado un precedente nefasto, premiando un comportamiento violento y desprestigiando la labor de los trabajadores”, lamentó el sindicato.
CC.OO. ha advertido que este tipo de incidentes se han vuelto frecuentes y que el nuevo pliego de gestión del centro contempla una reducción de vigilantes, lo que, según el sindicato, agrava peligrosamente la situación. En su comunicado, CC.OO. pidió medidas urgentes para reforzar la seguridad y garantizar la convivencia pacífica, insistiendo en la necesidad de actuar con firmeza frente a la violencia en el centro de menores.
