La chef ha sido galardonada con el Premio Convivencia 2021, y es referente en el mundo de la cocina a nivel internacional, defendiendo los valores de la naturaleza
Najat Kaanache se ha convertido en un referente para la cocina a nivel internacional. Española nacida en el País Vasco y descendiente de marroquíes, se ha convertido en una de las ganadoras del Premio Convivencia 2021 de Ceuta. Estudió cine en Londres, pero la vida le ha llevado a convertirse en empresaria, ejerciendo como chef en Fez. “Me dedico a cocinar y a utilizar la cocina como arma para establecer alianzas”, así se define la galardonada, que asegura que este premio le ha pillado por sorpresa.
Kaanache define “convivencia” como la capacidad de vivir con aquellas personas que están a nuestro alrededor “independientemente de cuál es su color, dinero, religión, cultura, etc. Para la chef, “convivir no es tener un pasaporte que te dé derecho a estar donde tú quieras, es qué hacer con ese pasaporte”.
Una de las misiones de la chef es facilitar la conciliación familiar y laboral de las personas. Por ello, insiste en que si a su restaurante acude una mujer con un bebé en la espalda y le dice “quiero trabajar y no sé dónde dejar a mi hijo”, ella le deja que vaya con el bebé. Así lo está haciendo con las cuatro mujeres que están con ella actualmente en el restaurante junto a sus bebés. Asimismo, asegura que si se encuentra a una mujer en una escalera cosiendo en una máquina a pie ropa magnífica y ella puede comprarse en una tienda el material para que esta le haga unos vestidos o unos manteles, “eso es convivencia”.
“Imagínate que yo he nacido en otro continente, y no tengo las posibilidades ni el derecho que me han dado el haber nacido donde he nacido. Si yo me puedo poner en los zapatos de ese ser humano, me imagino que actuaré con alta conciencia”, reivindica la vasco-marroquí.
Najat remarca que ella es mucho más que una chef. “Soy humana, compañera, madre, amiga, trabajadora, empresaria, y puedo pintar, escribir, etc. No me define ni un CV, ni un título, ni un quehacer”, apunta la joven.
La cocina que realiza Kaanache es una cocina “establecida con los valores de la naturaleza, de nuestro alrededor, de lo que nos da la tierra y el mar, y respetando que voy a cocinar con lo que tengo a mi alrededor, sin trampa”. Es así cómo ella sigue el legado de su abuela, de quien heredó la premisa de “cultiva, porque si no, no tendrás para cocinar”. La galardonada ha sembrado la solidaridad en aquellas personas que han coincidido con ella, y ahora comienza a cosecharlo con este Premio Convivencia 2021.
“Para mí, la ciudad de Ceuta es un espacio de gente soñadora, con esperanza, de gente que convive con el pasado que tiene, con el presente en el que vive, con el sueño del futuro, es extraordinario, es una ciudad ejemplo para toda España”, defiende “con todo corazón”.