Inundaciones, caídas de árboles e incendios de contenedores han sido los causantes de las salidas de los bomberos durante esta noche
Las fuertes lluvias y el temporal causado por la borrasca Filomena hacía prever que la noche no sería tranquila para el Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento. Ya desde primera hora de la noche, los bomberos tenían que asistir al Mercado Central, donde las fuertes lluvias provocaban la inundación de la planta baja y se tenían que realizar labores de achique por parte de los efectivos del cuerpo.
Inundaciones que también se han producido en varias viviendas, teniendo que asistir el SEIS a dos de ellas, situadas en la barriada de Hadú y la Avenida Reyes Católicos, a las que se tenían que trasladar a las 22:45 horas y, poco más tarde, a las 23:10 horas, respectivamente, para realizar labores de achique.
Más tarde, a las 02:00 horas, era en la Cuesta de la Legión, donde tenían que actuar, también por el exceso de agua, en el regristro de una alcantarilla. No obstante, no solo ha sido el agua el problema, también el viento, que conseguía poco antes de las once de la noche, a las 22:50 horas, hacer caer un árbol en la carretera del Monte Hacho.
Además, por si fuera poco con el temporal, la lluvia tampoco ha conseguido que frene el vandalismo y hacía que se produjera la última salida de los bomberos esta noche, a las 02:45 horas, que tenían que acudir a apagar un contenedor incendiado en la barriada de Juan Carlos I.