Tan solo una semana después de la denuncia de SEO/Birdlife que alertaba sobre la destrucción de la colonia de gaviota de Audouin en el puerto, un ciudadano denuncia que ha vuelto a ocurrir lo mismo, esta vez en la Zona de Especial Protección Para Aves (ZEPA) del monte Hacho «donde, curiosamente, ni siquiera una especie protegida logra encontrar las condiciones adecuadas para reproducirse sin molestias e interferencias humanas y donde las instituciones que deben protegerlas no han actuado»
Un ecologista ceutí asegura en un comunicado remitido a los medios de comunicación que pese a «la denuncia interpuesta por SEO/BirdLife ante el SEPRONA el día 12 de mayo, seguimos siendo testigos de la incapacidad, incompetencia e inacción de todas y cada una de las instituciones de nuestra ciudad que tienen la obligación de preservar, vigilar y proteger la naturaleza». Estas contundentes afirmaciones son producto de un nuevo caso de destrucción de una colonia de gaviotas de Audouin, esta vez en la Zona de Especial Protección Para Aves (ZEPA) del monte Hacho. Los espacios bajo esta denominación están protegidos por la legislación europea en materia medioambiental, por considerarse, precisamente, «zonas naturales de singular relevancia para la conservación de la avifauna amenazada de extinción».
Para mayor indignación de este ciudadano, relata en su escrito que tras un trabajo intensivo de inspección del litoral ceutí, «desde el Recinto hasta la Sirena de Punta Almina», en busca de nidos de esta especie de gaviotas, se informó a las autoridades relevantes del hallazgo de los mismos en la zona ZEPA «Acantilados del Hacho» para que tomase medidas de protección como restringir el acceso o colocar carteles advirtiendo de la presencia de los nidos; pero «el lunes a primera hora de la mañana se pudo comprobar que, efectivamente, ya había gente pescando en los acantilados de la Sirena de Punta Almina para lo cual tuvieron que atravesar andando la nueva colonia de cría y permanecían apostados con sus cañas a escasos metros de algunos nidos ya establecidos de Audouin».
«Ante estos hechos, a las 8:38 horas se llamó al 112 para que avisara al SEPRONA, aunque minutos más tarde, a las 8:48 horas, se pudo contactar directamente con la oficina del SEPRONA para poner en su conocimiento esta nueva situación constituyente de un grave delito contra la fauna y solicitar que se desplazase alguna patrulla a la zona, que se le indicó con detalle, para que retirasen a los pescadores y prohibiesen el acceso» continúa el comunicado del ecologista que sostiene que sus advertencias no fueron tomadas en cuenta ya que, a las 19:00 horas «seguían dos personas apostadas en los acantilados pescando y seis más disfrutaban de las espectaculares vistas de los acantilados a escasos metros de algunos nidos provocando el pánico y el abandono de, prácticamente, el 100 % de las gaviotas de Audouin«. Además, asegura que la zona no habría sido precintada ni señalizada.
Por último, el comunicado subraya que «todo este suceso constitutivo de un nuevo delito contra la fauna no se ha producido en un lugar cualquiera, sino que se ha dado dentro de una zona ZEPA, protegida para las aves, y que donde, curiosamente, ni siquiera una especie protegida logra encontrar las condiciones adecuadas para reproducirse sin molestias e interferencias humanas» y anuncia que el suceso «ya ha sido puesto en conocimiento de SEO/BirdLife para que decida qué medidas más contundentes va a emprender contra todos y cada uno de los organismos implicados en esta nueva muestra de desinterés e incapacidad para realizar sus cometidos en defensa de la protección de la fauna y en concreto de esta bellísima ave que ve gravemente afectada su viabilidad como especie reproductora en nuestra ciudad».