Cientos de funcionarios, en su mayoría jubilados, se han congregado este mediodía en el paseo de Sagasta de Zaragoza para manifestarse en defensa del sistema sanitario de la Mutualidad General de Funcionarios Civiles del Estado (Muface). Los asistentes han expresado su preocupación ante los cambios anunciados por el Gobierno en el modelo de gestión, que consideran un ataque a sus derechos adquiridos.
Con pancartas que destacaban lemas como “Defender Muface es defender la dignidad” y “No es un privilegio, es un derecho”, los manifestantes han exigido que el Ejecutivo reconsidere su decisión de reformar el modelo de la mutualidad. Muchos temen que las modificaciones supongan un deterioro en la calidad de los servicios sanitarios que reciben, especialmente en las coberturas específicas y en el acceso a la atención médica privada concertada, que históricamente ha sido una de las características clave del sistema.
Incertidumbre entre los funcionarios jubilados
Los cambios propuestos han generado incertidumbre, especialmente entre los funcionarios jubilados, quienes representan una parte significativa de los beneficiarios de Muface. “Nos sentimos desamparados. Este sistema nos ha garantizado una asistencia sanitaria de calidad durante toda nuestra vida laboral, y ahora no sabemos qué esperar”, lamentaba Ana Pérez, una maestra jubilada que acudió a la protesta.
Otros asistentes denunciaron la falta de información clara sobre cómo se implementará el nuevo modelo y qué impacto tendrá en las prestaciones. “No estamos pidiendo un favor, estamos exigiendo que se respete un derecho que hemos ganado con décadas de trabajo”, señaló Luis Martínez, un funcionario retirado de la Administración General del Estado.
Un sistema en debate
Muface, creada en 1975, permite a los funcionarios optar por la sanidad pública o por un sistema concertado con aseguradoras privadas. Este modelo ha sido defendido por muchos como un ejemplo de eficiencia y libertad de elección, pero también ha sido objeto de críticas, especialmente por parte de sectores que lo consideran un sistema desigual en comparación con la sanidad pública general.
El Gobierno ha justificado la reforma como una medida para garantizar la sostenibilidad del sistema y adaptar su funcionamiento a los desafíos actuales. Sin embargo, esta explicación no ha convencido a los manifestantes, quienes argumentan que los recortes o modificaciones en el modelo afectarían especialmente a los más vulnerables.
Próximas movilizaciones
Los organizadores de la concentración en Zaragoza han anunciado que esta no será la última movilización. “Seguiremos en la calle hasta que el Gobierno escuche nuestras demandas”, afirmó María López, portavoz del colectivo convocante.
La protesta de hoy se suma a otras manifestaciones celebradas en diferentes ciudades del país, en un contexto de creciente tensión entre los funcionarios y el Gobierno. El desenlace de este debate será clave para el futuro de Muface y para los miles de trabajadores y jubilados que dependen de este sistema.