Aunque Europa es líder mundial en la lucha contra el cambio climático y ha dado pasos decididos en ese camino, la juventud cree insuficiente esa hoja de ruta y ha dado un golpe de efecto y pide soluciones sobre la gestión del medioambiental pidiendo políticas activas sobre el desastre climático que ya está en marcha. El movimiento ‘Jóvenes por el clima’ se extiende por el continente impulsado por la sueca de 16 años Greta Thunberg y toma fuerza en España.
Ante un modelo agotado, de recortes y desigualdad creciente necesitamos un nuevo modelo que ponga la economía al servicio de las personas y del planeta. Una economía social y solidaria para el bien común que dé lugar a un modelo sostenible que se traduzca en mayor bienestar, un reparto más equitativo de la riqueza y mayor inclusión social.
La Ciudad Autónoma de Ceuta no es un ejemplo de gestión para la creación de empleo. Con una población de 84.144 habitantes, refleja un paro de 11.369 personas, un 33,18 % de la población en edad de trabajar, de las cuales hay un porcentaje muy importante de jóvenes. (https://datosmacro.expansion.com/paro/espana/municipios/ceuta/ceuta).
Para mejorar debemos incidir en la formación por la implantación de una economía circular que convierta residuos en recursos, una nueva regulación de la industria financiera, un impulso en sectores verdes como las energías renovables, la eficiencia energética, la agricultura, ganadería e industria sostenibles, unas infraestructuras y movilidad que responsa a nuestras necesidades y no contamine, el turismo sostenible, la eficiencia en el uso de los recursos, la protección de los recursos naturales y la investigación, innovación y educación.
Ello permitirá estimular el espíritu empresarial y crear empleo. Un empleo verde destinado a mejorar el entorno en el que vivimos y garantizar nuestra calidad de vida.Son empleos de calidad que ofrecen un trabajo digno con el que poder tener su propio proyecto vital, con protección social, suficientes ingresos, respeto sus derechos laborales y capacidad de participación activa en la toma de decisiones. Son empleos que mejoran nuestro entorno social, mejorando nuestro entorno natural (ahorrando energía y materias primas, utilizando energías limpias, reduciendo los desechos y la contaminación y protegiendo la biodiversidad y los ecosistemas).
Proponemos para ello un modelo de consumo responsable como instrumento para contrarrestar la huella ecológica de nuestra sociedad, fomentando las vías de consumo alternativas. La ciudadanía tiene a su alcance una herramienta fundamental de cambio social, el consumo. Como consumidores y ahorradores tienen la oportunidad de utilizar criterios de justicia social y ambiental para promover, a través de los patrones de compra e inversión, la construcción de la sostenibilidad.
El fracaso de la gestión del gobierno del PP en nuestra hermosa ciudad, queda reflejado en muchos datos vergonzantes que nos hacen tener los records sociales más nefastos de España y Europa. Si queremos dejar de pasear rodeados de malos humos y no seguir respirando el veneno que emiten las chimeneas de diésel tenemos que apostar por una política verde que cree empleo de calidad entorno a una energía limpia, un programa real que está implementando Podemos en otras ciudades de España. ¿No se merece Ceuta ser una ciudad moderna?