Concluido el culebrón de las Elecciones, hemos podido conocer los nuevos consejeros que, en este momento decisivo para nuestra querida Ceuta, clavarán la tapa del ataúd de nuestra Ciudad o bien marcarán un nuevo rumbo y el definitivo despegue económico de nuestra tierra.
Una noticia que ha pasado totalmente desapercibida ha sido la integración de Turismo en la Consejería de Economía. No es cuestión baladí, todo lo contrario. Muestra la intención de la Casona de la Plaza de África de impulsar el Turismo en nuestra Ciudad, integrando la cartera en la más importante de todas las Consejerías. El gesto ha sido notable, pasando de ser la segundona de deportes, a integrarse en una de las consejerías mejor dotada de medios materiales y profesionales.
Ceuta se encuentra en una situación tremendamente delicada. Claro está que el PSOE en la Moncloa, en principio, nada beneficia al Gobierno del PP en la Ciudad Autónoma, que el cierre de la frontera a las mercancías de Ceuta empeora la débil economía local, y que, por el momento, nadie es capaz de atraer inversiones a la Ciudad.
En la anterior legislatura se hicieron grandes avances en el desarrollo del turismo de manos del consejero D. Fernando Ramos, logrando impulsar importantes pruebas deportivas. Incomprensiblemente el proyecto turístico de Ceuta fue castigado con la entrada del nuevo consejero, decisión inexplicable a día de hoy. Total, dos años perdidos.
He tenido ocasión de conocer y reunirme con el actual consejero Sr. Gaitán, con una agenda aún más estrecha que la mía, a quien agradezco la oportunidad de proponer el gran proyecto que llevamos años proponiendo, Ceuta Paraíso Náutico.
Precisamente fue al Consejero de Economía al que propuse el proyecto, porque consideramos que el Turismo es sector estratégico en Ceuta y debía depender de su Consejería, al disponer de muchos mejores medios humanos y materiales.
Es una obviedad, que el desarrollo del turismo conlleva la necesidad de formar profesionales, y el turismo náutico exige trabajadores muy cualificados, cuya formación debemos prever y proveer.
Todos sabemos que Ceuta disfruta de una costa envidiable, paisajes maravillosos, unos servicios que exceden con mucho a los de cualquier ciudad similar a la nuestra en extensión y población, por lo que no me extenderé. Ceuta es una perla, que todos sabemos, no se ha sabido vender.
Ahora bien, junto con el turismo, existen oportunidades que no debemos perder y llevo proponiendo varios años, predicando en el desierto. El Brexit es la gran oportunidad para Ceuta. Tenemos un régimen fiscal envidiable, sin las limitaciones de nuestros vecinos llanitos. Tenemos las bases bien cimentadas para impulsar un sector financiero, de servicios tecnológicos, el marítimo, y solo falta la voluntad decidida de lograr el desarrollo de nuestra Ciudad. Prosperidad para todos. Es nuestra oportunidad, y no podemos permitir que otros nos la arrebaten. Será Ceuta, o Malta.
El PP ha logrado únicamente la mayoría simple. Tiene una última oportunidad, un último cartucho y este no puede usarse para pagar favores o lealtades.
El Gobierno Autonómico tiene la responsabilidad de elegir a los mejores de entre los mejores de dentro o fuera del PP, independientes o militantes, y dispuesto a trabajar hasta reventar por Ceuta. Eso es lo que esperamos de ellos, ni más ni menos.
Por nuestra parte, dejaremos los sueños para otros y seguiremos trabajando sin descanso por una Ceuta próspera, y por nuestro gran proyecto, Ceuta Paraíso Náutico.