Hoy se celebra el Día de Europa para celebrar el momento en que, hace 69 años, un 9 de mayo como hoy, el ministro de Exteriores francés Robert Schuman proponía la construcción de una Europa unida como antídoto contra la guerra. Los y las socialistas queremos reivindicar los valores que durante estos 69 años han servido para forjar la Unión Europea, la respuesta política al conflicto más sofisticada que los europeos fuimos capaces de imaginar, y explicar la Europa que queremos impulsar en este nuevo ciclo que se abre con las elecciones al Parlamento Europeo del próximo 26 de mayo.
Con los comicios de mayo se abre una etapa clave para el continente. Debemos enfrentar el auge de movimientos de extrema derecha, populistas, nacionalistas y eurófobos que promulgan el repliegue identitario y el levantamiento de viejas y nuevas fronteras, envueltos en propaganda y sirviéndose de la desesperanza de amplias capas de la sociedad para quienes la crisis no es un recuerdo, sino la realidad de su día a día.
Ante ese escenario, desde el PSOE vamos a proteger la idea de Europa para que Europa proteja a sus ciudadanos y ciudadanas; para que siga ofreciéndonos paz y seguridad y para que vuelva a garantizar prosperidad económica, bienestar social y sostenibilidad ambiental. Los grandes retos globales —como la pérdida de biodiversidad y el cambio climático, la erradicación de la pobreza, la promoción del desarrollo sostenible, la igualdad entre mujeres y hombres, la gestión humana de las migraciones, la revolución tecnológica, la regulación del comercio mundial o las nuevas amenaza híbridas y el terrorismo global— solo pueden encontrar solución desde la unión de fuerzas que nos ofrece la Unión Europea, con el objetivo de poner a las personas y al planeta en el centro de una globalización justa y regulada.
Queremos una Europa más social, una Europa que tenga en la creación de empleo una de sus prioridades. Una Europa que luche contra la desigualdad, que incida en la armonización fiscal y en la lucha contra la evasión. Una Europa que cuente con herramientas para luchar contra la competencia social y ambientalmente desleal. Una Europa feminista, que tenga la lucha contra la violencia de género en el centro de sus prioridades. Una Europa abierta y diversa. Una Europa solidaria, que abrace su responsabilidad como actor global para el impulso de la Agenda 2030, de los derechos humanos y de una globalización regulada. Una Europa responsable, que cumpla con sus obligaciones hacia aquellos que buscan una vida mejor entre nosotros.
Una Europa verde, que piense en las generaciones venideras y asuma el liderazgo global en la lucha contra el cambio climático, la pérdida de biodiversidad y el deterioro ambiental.
El europeísmo está en lo más profundo de los valores socialistas. Con el regreso del PSOE al gobierno de la nación en junio de 2018, bajo el liderazgo de Pedro Sánchez, la construcción europea vuelve a ser una gran prioridad para España, particularmente en su dimensión política. Somos conscientes de que no hay un mejor instrumento para defender nuestros valores e intereses en el mundo que una Unión Europea fuerte e integrada y es por ello que hemos impulsado —y continuaremos haciéndolo desde el Gobierno— el papel de España, junto con Alemania, Francia y otros países como Portugal, en el núcleo motor de la construcción europea, liderando grandes iniciativas como el establecimiento de un seguro europeo de desempleo o la adopción de una Estrategia Europea vinculante para la Igualdad de Género. Para completar este impulso progresista en el corazón de la UE, necesitamos, también, ser fuertes en el Parlamento Europeo y poder contar con una Comisión Europea con Frans Timmermans, el candidato común de los socialdemócratas europeos, como presidente de la Comisión. Nos jugamos demasiado en este nuevo ciclo y vamos a luchar con fuerzas en esta batalla por la Europa que queremos.
Porque somos socialistas, somos europeístas.
¡Feliz Día de Europa!