La actriz española, primera mujer trans nominada al Oscar, lidera un año marcado por la inclusividad, la política y la controversia cultural.
Los premios Oscar 2025 se perfilan como una edición histórica en todos los sentidos. Las nominaciones, anunciadas al amanecer en Los Ángeles por los cómicos Rachel Sennott y Bowen Yang, dejaron en evidencia que la Academia de Cine de Hollywood apuesta más que nunca por la diversidad, lo disruptivo y lo político.
La gran protagonista de la jornada fue Karla Sofía Gascón, quien ha hecho historia al convertirse en la primera mujer trans nominada al Oscar como mejor actriz por su papel en Emilia Pérez, el ambicioso narcomusical de Jacques Audiard. Gascón, que ya ganó en Cannes por su interpretación, compite con actrices como Demi Moore (La sustancia), Cynthia Erivo (Wicked), Mikey Madison (Anora) y Fernanda Torres (I’m Still Here).
El impacto de Emilia Pérez no se detuvo ahí: la producción francesa logró 13 nominaciones, incluyendo mejor película, mejor dirección, mejor fotografía y dos de sus canciones originales (El mal y Mi camino). Este hito convierte a la película en la primera producción internacional en alcanzar semejante reconocimiento, consolidándose como un fenómeno global que entusiasma a unos y genera rechazo en otros sectores, especialmente entre los movimientos más conservadores.
Un año político y disruptivo
La política ha sido una lectura inevitable de las nominaciones, que parecen desafiar las tensiones de la guerra cultural en curso. Desde The Brutalist, de Brady Corbet, que reivindica la emigración y el arte moderno, hasta Wicked, que cuestiona los estereotipos maniqueos, las películas nominadas reflejan una resistencia al neoconservadurismo y una apuesta por narrativas inclusivas y contestatarias.
Entre las cintas con mayor número de nominaciones destacan The Brutalist y Wicked con 10 cada una, seguidas de A Complete Unknown y Cónclave con 8, y Anora, ganadora de la Palma de Oro en Cannes, con 6. Estas historias abordan temas como la emigración, el Holocausto, la brutalidad carcelaria y la lucha de las trabajadoras sexuales desde perspectivas frescas y poco convencionales.
El ascenso de Karla Sofía Gascón
La nominación de Gascón es un hito que no solo marca un avance en representación trans en el cine, sino que también consolida a la actriz como una de las figuras más destacadas de la industria en este momento. Proveniente de Alcobendas, al igual que Penélope Cruz, Gascón ha roto barreras en una industria tradicionalmente reticente a los cambios.
«Es un reconocimiento que va más allá de mi trabajo. Representa una victoria para todas las personas que han luchado por la igualdad y la diversidad», declaró Gascón en una reciente entrevista.
Los grandes olvidados
A pesar de la diversidad y la amplitud de temas en las nominaciones, no todos los favoritos lograron entrar en la lista final. Entre los grandes ausentes destacan el español Pedro Almodóvar, quien no consiguió una nominación por el guion de La habitación de al lado, y Alberto Iglesias, que tampoco logró ser reconocido por la banda sonora de la misma película.
España, que aspiraba a varias categorías, se quedó también sin representación en la categoría de cortometrajes, donde Dani Feixas (París 70) y Àlex Lora (La gran obra) no lograron superar el corte.
La diversidad en los Oscar 2025
En la categoría de mejor película, los nominados incluyen, además de Emilia Pérez, títulos como Dune: Parte 2, de Denis Villeneuve; Aún estoy aquí, de Walter Salles; Nickel Boys, de RaMell Ross; y La sustancia, de Coralie Fargeat. Estas películas abordan temas que van desde el ecologismo y la crítica al capitalismo hasta la brutalidad de las dictaduras y la manipulación de los cuerpos femeninos.
Por su parte, la categoría de mejor actor reúne a Adrien Brody (The Brutalist), Timothée Chalamet (A Complete Unknown), Colman Domingo (Sing Sing), Ralph Fiennes (Cónclave) y Sebastian Stan, quien interpreta a un joven Donald Trump en The Apprentice.
Un año que promete hacer historia
Con la ceremonia programada para el 2 de marzo en el Dolby Theatre de Hollywood y Conan O’Brien como anfitrión, los Oscar 2025 se perfilan como una edición que pasará a la historia. Más allá de los premios, las nominaciones ya han dejado claro que la industria del cine está cambiando, adoptando narrativas más inclusivas y provocadoras que no dejan indiferente a nadie.
La última vez que un español ganó un Oscar fue en 2009, cuando Penélope Cruz se alzó con el premio a mejor actriz de reparto. Este año, las miradas están puestas en Karla Sofía Gascón. Pase lo que pase, el mundo ya está temblando.