Donald Trump, presidente electo de Estados Unidos, ha designado a Pam Bondi, ex fiscal general de Florida, como su elección para ocupar el cargo de fiscal general en su próximo gabinete. Esta decisión sigue a la renuncia de Matt Gaetz, quien se vio obligado a retirarse debido a una serie de escándalos personales.
Trump destacó la experiencia de Bondi, afirmando que durante sus casi 20 años como fiscal, fue implacable con los delincuentes violentos y trabajó arduamente para mantener seguras las calles de Florida. Como la primera mujer en ocupar el puesto de fiscal general en Florida desde 2011 hasta 2019, Bondi se enfocó en combatir el tráfico de drogas y reducir las muertes por sobredosis de fentanilo.
El presidente electo recordó que Bondi formó parte de su Comisión de Abuso de Drogas y Opioides durante su primer mandato, donde contribuyó significativamente a salvar vidas. Trump expresó su confianza en que Bondi devolverá al Departamento de Justicia su propósito original de luchar contra el crimen y garantizar la seguridad en Estados Unidos.
Por otro lado, Matt Gaetz enfrentó investigaciones por presunto abuso sexual y consumo de drogas, lo que llevó a su renuncia como candidato a fiscal general. Aunque nunca fue imputado, las acusaciones y la presión política hicieron insostenible su candidatura.
En paralelo, Pete Hegseth, designado por Trump para liderar el Departamento de Defensa, también enfrenta controversias debido a un informe policial que detalla un supuesto caso de asalto sexual. Aunque el caso fue cerrado sin cargos, Hegseth llegó a un acuerdo de confidencialidad con la denunciante.
El futuro gabinete de Trump aún tiene vacantes importantes, incluyendo el secretario del Tesoro y otros puestos clave. La selección de Bondi es vista como un movimiento estratégico para fortalecer su administración en temas de justicia y seguridad.