España se une a la Alianza Global contra el Hambre y la Pobreza, una iniciativa liderada por Lula da Silva.
En el marco de la cumbre del G20 celebrada en Brasil, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado una contribución de 400 millones de euros a la Asociación Internacional de Fomento (AIF), una entidad del Banco Mundial que se centra en apoyar a los países más desfavorecidos. Este compromiso refuerza la participación de España en la Alianza Global contra el Hambre y la Pobreza, impulsada por el presidente brasileño Lula da Silva con el respaldo de 82 países.
“La tragedia colectiva del hambre y la pobreza afecta a 733 millones de personas en el mundo, una cifra comparable a la población conjunta de Brasil, México, Alemania, Reino Unido, Sudáfrica y Canadá. Esto es inaceptable”, señaló Lula durante la inauguración de la cumbre, marcando el inicio de la alianza global.
En su intervención, Sánchez calificó las cifras de hambre y pobreza como «totalmente evitables» y apeló a los países más desarrollados a asumir mayores responsabilidades para erradicar estas desigualdades. Además, subrayó la lucha contra el cambio climático como una prioridad crucial, vinculándola con el impacto directo de fenómenos como la reciente DANA en España.
“Es imperativo redoblar los esfuerzos porque el cambio climático mata. Lo acabamos de vivir en mi país”, enfatizó Sánchez, reiterando el vínculo entre la crisis climática y las desigualdades globales.
La contribución española de 400 millones de euros a la AIF representa un aumento de casi el 40% respecto a las aportaciones previas y busca impulsar programas para reducir la pobreza y fortalecer economías vulnerables. “Insto a todos los presentes a aumentar nuestra ambición colectiva”, dijo Sánchez al resto de líderes.
Acompañamiento y agenda paralela
La delegación española en Brasil incluyó a Begoña Gómez, esposa del presidente, quien pospuso una cita judicial para poder asistir al evento. Aunque es habitual que los cónyuges de líderes del G20 participen en estas cumbres con una agenda paralela, Moncloa no ha dado detalles sobre las actividades de Gómez.
La invitación oficial, enviada por Janja Lula da Silva, esposa del presidente brasileño, especificaba un espacio reservado para reuniones bilaterales y la presencia en las sesiones plenarias junto a las delegaciones nacionales. Gómez estuvo presente durante las intervenciones de Sánchez.
La cumbre del G20, donde los países miembros representan el 85% del PIB mundial y el 75% del comercio global, ha marcado un hito con esta alianza que promete unir esfuerzos para combatir el hambre y la pobreza en un mundo cada vez más desigual.