Inflación y Perspectivas Futuras
Christine Lagarde, presidenta del Banco Central Europeo (BCE), ha asegurado que la inflación en la eurozona se reducirá hacia el objetivo del 2% para 2025, a pesar de un repunte temporal esperado en el último trimestre de este año. Este aumento se atribuye al «efecto de base» debido a las caídas previas en los precios energéticos.
En noviembre, la inflación subió tres décimas respecto a octubre, alcanzando el 2,3%. Este incremento se debe principalmente a la moderación en la caída de los precios energéticos y al aumento de la inflación en los alimentos. La inflación subyacente se mantuvo en el 2,7% y se espera que continúe en niveles similares hasta principios de 2025.
Decisiones del BCE y Tipos de Interés
Lagarde destacó que el BCE revisará su posición en la próxima reunión, sin comprometerse a una senda específica de tipos de interés. En octubre, el BCE redujo los tipos en 25 puntos básicos, dejándolos en el 3,25%, tras recortes anteriores en junio y septiembre. Estos ajustes reflejan el progreso en el proceso de desinflación.
Lagarde enfatizó que, aunque la batalla contra la inflación está cerca de cumplirse, aún queda trabajo por hacer. La senda de los tipos de interés es a la baja, pero el ritmo dependerá de los datos futuros.
Crecimiento Económico y Riesgos Comerciales
Las perspectivas económicas para la eurozona indican un crecimiento débil a corto plazo, influenciado por la ralentización en el sector servicios y la contracción del sector manufacturero. Sin embargo, se espera que la recuperación económica gane impulso más adelante.
Lagarde advirtió sobre los riesgos geopolíticos elevados y las amenazas al comercio internacional, que podrían impactar negativamente en la economía de la eurozona debido a su alta integración en las cadenas globales de suministro.
Relaciones Comerciales Internacionales
En cuanto a las relaciones comerciales con Estados Unidos bajo la nueva administración de Donald Trump, Lagarde expresó preocupación por una posible guerra comercial. Instó a los europeos a prepararse estratégicamente para las negociaciones comerciales futuras.
Lagarde también apoyó la idea de financiar inversiones conjuntas en la UE para cerrar la brecha con competidores como China y Estados Unidos, siguiendo las recomendaciones del informe de Mario Draghi. Estas inversiones podrían aprovechar economías de escala y abordar retos transfronterizos, beneficiando a todos los europeos.