Hace unas semanas, Delegación del Gobierno, Ciudad y Autoridad Portuaria escenificaron unidad a la hora de mostrarse firme con los jóvenes que intentan migrar a través del Puerto de Ceuta. Desde entonces, se ha incrementado la vigilancia policial en las zonas que más frecuentan las personas migrantes.
Tanto la zona de poniente como la de levante está continuamente patrullada por efectivos de la Guardia Civil y de la Policía Portuaria. En la zona más oeste del puerto, donde entran las mercancías, están apostados 24 horas coches policiales, fijos en las esquinas por donde se podría acceder más fácilmente, al mismo tiempo que otros efectivos dan vueltas. Los principales afectados de esta situación son los jóvenes que tratan de migrar, que se ven cada día más acosados por las fuerzas del orden. Una de las siete medidas aprobadas en 21 de junio fue justamente la de poner patrullas de la benemérita de forma permanente en las zonas restringidas.
Las obras de blindaje podrían empezar, ahora sí, la semana que viene
Se espera que esta semana la Autoridad Portuaria (AP) dé a conocer el día exacto de inicio de las obras de «blindaje», previsto en un inicio para finales del mes de junio, con un presupuesto de 2’7 millones de euros iniciales. El presidente de la AP, Juan Manuel Doncel, se atrevió a aventurar a finales de abril que las obras podrían empezar un mes después de sus declaraciones. El dinero sale del presupuesto corriente de la Autoridad Portuaria, con el beneplácito de Puertos del Estado, de color rojo socialista en estos momentos.
En la explanada de enfrente del Muelle de Poniente una excavadora está limpiando la zona de matorrales, piedras y basura. Algunos migrantes menores de edad se resguardaban entre esta maleza en pequeños cobertizos, que hoy han sido desmantelados por operarios de limpieza de UTE junto con la colaboración de la Policía Portuaria, que se ha encargado de «echar» a los menores. No ha habido agresiones directas por parte de la policía. Sin embargo, los jóvenes denuncian que están constantemente hostigados por diferentes cuerpos policiales, muchas veces, cuentan, de formas violentas.
Desde la asociación Maakum, que acompaña y hace seguimiento de los jóvenes migrantes en los aledaños del Puerto, denunció tanto los términos utilizados por Delegación del Gobierno y Ciudad, «sanear y «limpiar», en referencia a las actuaciones contra estas personas. También ponían la atención en que “en ningún momento se hace mención a la protección y/o defensa de los derechosde las personas que habitan y transitan la zona portuaria”.