El gobierno conservador de Portugal, encabezado por Luis Montenegro, ha presentado un ambicioso plan para retener a los jóvenes talentos dentro del país. La propuesta, que forma parte del proyecto de presupuesto para 2025, busca ofrecer beneficios fiscales significativos a los jóvenes trabajadores de hasta 35 años.
Actualmente, los jóvenes portugueses ya disfrutan de ciertas exenciones fiscales gracias a un régimen implementado por el anterior gobierno socialista. Sin embargo, Montenegro pretende ampliar estas ventajas, extendiéndolas hasta los diez primeros años en el mercado laboral o hasta que el beneficiario cumpla 36 años.
Detalles de la Propuesta
- Exención total del impuesto sobre la renta (IRS) en el primer año de trabajo.
- Descuentos del 75% entre el segundo y cuarto año.
- Descuentos del 50% entre el quinto y séptimo año.
- Descuentos del 25% en los tres últimos años del periodo de diez años.
Estos beneficios se aplicarán a salarios de hasta 28.000 euros anuales, manteniendo este límite fijo durante toda la década.
El Contexto Migratorio
La medida surge en respuesta a la preocupante tasa de emigración juvenil en Portugal. Según el Observatorio de la Emigración del Instituto Universitario de Lisboa, uno de cada cuatro portugueses de entre 15 y 39 años vive en el extranjero. Anualmente, cerca de 60.000 personas abandonan el país, el 70% de ellas menores de 40 años.
El gobierno espera que estos incentivos fiscales hagan más atractivo el mercado laboral portugués para los jóvenes, reduciendo así la necesidad de buscar oportunidades en el extranjero.
Desafíos Políticos
A pesar de las negociaciones con el Partido Socialista (PS), la aprobación del presupuesto no está garantizada. Los socialistas han expresado su preocupación de que las medidas propuestas puedan discriminar a los trabajadores mayores de 35 años y beneficiar principalmente a aquellos con salarios más altos.
Montenegro ha ajustado su propuesta inicial, que contemplaba una tasa máxima del 15% de IRS para jóvenes con salarios brutos de hasta 81.199 euros, para intentar conseguir el apoyo del PS. Sin embargo, las diferencias persisten, especialmente en lo que respecta a la reducción del impuesto de sociedades.
La tramitación parlamentaria del presupuesto comenzará el 30 de octubre, con una votación final prevista para el 28 de noviembre. El resultado de estas deliberaciones será crucial para determinar si Portugal puede implementar estas reformas fiscales y, en última instancia, retener a su juventud talentosa dentro de sus fronteras.