La denuncia de CCOO se centra en la saturación del servicio de transporte sanitario programado, un problema que ha ido en aumento en los últimos meses. Según el sindicato, la situación se ha vuelto insostenible, especialmente tras la avería de un vehículo clave de INGESA, lo que ha obligado a redirigir recursos de manera urgente.
El transporte sanitario programado es esencial para garantizar que los pacientes puedan asistir a sus citas médicas y recibir tratamientos necesarios. Sin embargo, la falta de vehículos adecuados está poniendo en riesgo la salud de muchos ciudadanos que dependen de este servicio.
Impacto en los pacientes
Los pacientes que requieren transporte sanitario programado son, en su mayoría, personas con movilidad reducida o que necesitan atención médica constante. La saturación del servicio significa que estos pacientes enfrentan retrasos significativos, lo que puede llevar a complicaciones en su salud.
Riesgos asociados
CCOO advierte que la situación actual no solo afecta a los pacientes, sino también al personal sanitario, que se ve obligado a trabajar bajo presión constante. Esto puede derivar en errores humanos y una disminución en la calidad del servicio prestado.
Medidas propuestas
Para abordar esta crisis, CCOO sugiere una serie de medidas urgentes. Entre ellas, destacan la reparación inmediata del vehículo averiado de INGESA y la contratación de más personal para aliviar la carga de trabajo actual. Además, proponen una revisión exhaustiva del sistema de transporte sanitario para identificar y corregir fallas estructurales.
Conclusión
La saturación del transporte sanitario programado es un problema que requiere atención inmediata. Las autoridades deben tomar medidas rápidas y efectivas para garantizar que todos los ciudadanos tengan acceso a los servicios médicos que necesitan sin demoras innecesarias. La salud pública depende de un sistema de transporte sanitario eficiente y bien gestionado.