El Gobierno Local ha votado en contra de la propuesta, ya que Ceuta Ya! no ha aceptado la transaccional. El resto de partidos han votado a favor
La diputada de Ceuta Ya!, Julia Ferreras, ha defendido la importancia de la implementación del Programa KIVA en todos los centros escolares de la Ciudad, en colaboración con el MEFP, para luchar contra el acoso escolar.
Ferreras ha defendido lo que los datos avalan, que el acoso escolar es un problema y ha recordado que “los recientes hechos acaecidos en un instituto de Jerez, saldados con el apuñalamiento de cinco personas, ha vuelto a poner en el foco este terrible problema”, lamentando que tenga que ser “en momentos como este cuando da la impresión de que todo el mundo toma conciencia”.
Para Julia Ferreras, se habla de un fenómeno de una “enorme capacidad destructiva”, y que “inflige un daño incalculable a sus víctimas”. La diputada afirma que “no podemos limitarlo únicamente a los llamativos casos de agresión física” e incide en la “gran profundidad y extensión” y en los “efectos devastadores” del “mal llamado acosos de baja intensidad”. Por ello, “la erradicación de esta lacra es, y debe ser, un compromiso compartido por toda la sociedad y, en mayor medida, por todas las instituciones”. En ese sentido, su formación asevera que “la acción de la Asamblea, y del propio Gobierno, en esta materia es absolutamente insuficiente, prácticamente nula”.
Por parte de la consejera de Educación y Cultural, Pilar Orozco, ha reconocido que es una lacra y un problema que existe en los colegios de Ceuta «y en el mundo entero», y aunque ha recordado a Ceuta Ya!, que no tienen las competencias, ha reconocido que la propuesta «es interesante», pero por no tener las competencias han propuesto una transaccional, donde se tenga en cuenta al Ministerio y la opinión de los profesionales de los colegios, se reconoce la necesidad pero se quiere contar con la comunidad educativa y contar con el Ministerio porque es imposible aplicarlo sin tener competencias.
Ferreras, que ha defendido apasionadamente su propuesta, ha recriminado al Gobierno local que «no es una cuestión de competencias, se convenia con el Ministerio otras tantas campañas, el Ministerio propone y los centros aceptarán o no, el precio es irrisorio, 5.000 euros, por una sola farola de la Gran Vía tendríamos cuatro colegios, tres años, pero con un ejemplo más reciente, cada agente social en reunión de la mesa de dialogo social, nos va a costar 60.000 euros, lo que serían cuatro centros en el programa Kiva durante tres años».