El pasado sábado, miles de empleados públicos temporales se reunieron en Madrid para participar en una manifestación convocada por la Unión Sindical Contra la Temporalidad. Según la organización, alrededor de 6,000 personas se unieron a la marcha, mientras que la Delegación del Gobierno estimó la participación en unas 2,500 personas.
Bajo el lema «No somos plazas, somos personas», los manifestantes recorrieron las calles desde la plaza de Neptuno hasta la Gran Vía, exigiendo soluciones concretas a la problemática de la temporalidad en el empleo público. Fernando Villalba, coportavoz de la Unión Sindical, destacó la necesidad de abordar los «dramas» personales que enfrentan muchas familias debido a esta situación prolongada.
Yolanda Segura, también coportavoz, subrayó que la Unión Europea ha instado a España no solo a resolver la temporalidad, sino también a ofrecer soluciones a las personas afectadas. Actualmente, se estima que unas 800,000 personas en todo el país no han conseguido plaza debido a los procesos de «libre concurrencia».
La manifestación contó con la participación de trabajadores temporales de diversos sectores y comunidades autónomas, incluyendo bomberos forestales, empleados municipales, personal educativo y administrativo. Nieves, una trabajadora de 64 años, relató su experiencia de 25 años trabajando sin plaza fija en centros de menores protegidos en Madrid.
Ángeles, otra manifestante, compartió que lleva 22 años como interina en una escuela infantil tras obtener una nota alta en una oposición sin lograr una plaza. Águeda, de Sevilla, denunció que más de cien personas quedaron fuera en el último proceso de empleo público de la ciudad.
La protesta se produce tras una resolución del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) que insta a España a convertir en fijos a los interinos de larga duración. Sin embargo, la plataforma organizadora critica que el gobierno aún no ha implementado la directiva europea sobre temporalidad ni ha reducido la tasa de interinidad al 8%, como establece la Ley 20/2021.
Además, consideran que la convocatoria excepcional de estabilización de empleo temporal ha fracasado, ya que solo se han estabilizado algunas plazas, dejando a muchas personas con décadas de antigüedad sin empleo. Las recientes sentencias del TJUE refuerzan la necesidad de estabilizar a los trabajadores afectados como solución más adecuada.