El diario El País publica hoy una encuesta que da por ganador al PSOE con 122 escaños. El segundo partido más votado sería el PP con 76 escaños. Ciudadanos obtendría 55, Unidas Podemos 40 y Vox 31. Los partidos nacionalistas serían clave para formar gobierno.
La encuesta dibuja un escenario en el que solo el PSOE tendría la posibilidad de gobernar, eso sí, pactando con otros partidos. Existen dos alternativas: un pacto entre las mismas fuerzas que apoyaron la moción de censura (Unidas Podemos y partidos nacionalistas), o un pacto entre socialistas y Ciudadanos.
Pacto con Unidas Podemos
En el primer caso, el PSOE con 112 escaños necesitaría el apoyo de Unidas Podemos, que alcanzaría los 40 escaños, y también de los partidos nacionalistas. A priori, que Unidas Podemos y el PSOE llegasen a un acuerdo no parece un obstáculo muy difícil de salvar. Por otro lado, si bien es cierto que con el apoyo de los partidos nacionalistas los números suman, también lo es que Esquerra Republicana (ERC), que obtendría 9 escaños, votó contra los Presupuestos Generales, motivo principal porque el Gobierno se vio forzado a convocar elecciones. Los socialistas necesitarían sumar, como mínimo, el apoyo de Esquerra y el PNV, que juntos sumarían 14 escaños.
Asimismo, a nadie se le escapa que la mayoría de los partidos nacionalistas están abiertamente enfrentados a las fuerzas de derecha y esto hace pensar que, pese a todo, finalmente, apoyarían a un gobierno progresista encabezado por el PSOE. Aunque las relaciones en política a veces no siguen los principios estrictos de la lógica.
Pacto con Ciudadanos
Alber Rivera ya anunció que Ciudadanos ha decidido de forma unánime no pactar con el PSOE tras las elecciones generales. Ahora bien, si como indica la encuesta de El País, entre ambas fuerzas superasen los 176 escaños que marcan la mayoría absoluta, Ciudadanos tendría la posibilidad de dejar a los partidos nacionalistas fuera de la escena política. No necesitarían sumar sus apoyos para gobernar.
Ante esta hipotética situación, cuesta pensar que la formación naranja no se replantearía su postura de no pactar con el PSOE. Tendría la posibilidad de gobernar con el PSOE ocupando el rol que ejerce actualmente Unidas Podemos. Estarían en el mismo derecho que los de Pablo Iglesias de exigir, por ejemplo, la vicepresidencia.
Las derechas no suman
Si nos basamos en los datos de la encuesta, la fragmentación del voto de derechas se traduce en un reparto que imposibilita la opción de formar gobierno. El PP sería el partido más votado de este opuesto ideológico con 76 escaños. Ciudadanos, como ya hemos explicado, alcanzaría los 55. Vox, finalmente, sumaría 31, una cifra similar a la que obtuvo Ciudadanos en 2015. Juntos se quedarían a 14 escaños de la mayoría absoluta. Necesitarían buscar apoyos en más partidos y solo les quedarían los partidos nacionalistas.
¿Pacto de derechas y partdios nacionalistas?
Sin duda, es la posibilidad más rocambolesca que nos ofrece esta encuesta. Una colación de los tres partidos de derechas buscando el apoyo de partidos nacionalistas para formar gobierno. En otras palabras, El Partido Popular, que aplicó el 155, junto con Ciudadanos y Vox, que no son precisamente amigos del independentismo, tratando de convencer a Esquerra Republicana y PDeCat para sumar su apoyo.
Por inverosímil que parezca la hipotética situación, el Partido Popular ya ha llegado a acuerdos similares con el nacionalismo para gobernar. José María Aznar pisó la Moncloa por primera vez gracias a un pacto con Jordi Pujol.
La opción «innombrable»
La última de todas las posibilidades sería que ningún partido consiguiese sumar apoyos suficientes hubiese que repetir elecciones, como ya pasó tras las generales de 2015 ¿Se imaginan repetir de nuevo las elecciones generales unos meses después de celebrarlas? ¿Cómo afectaría a las elecciones autonómicas que no hubiese un acuerdo claro de gobierno y las negociaciones estuviesen aún abiertas? No descarten nada.