Alejandro Ramírez es el actual consejero de Fomento y Turismo de la Ciudad Autónoma de Ceuta. Licenciado en Administración y Dirección de Empresas, era director general de de Economía, Comercio y Turismo hasta que la dimisión de Javier Guerrero como consejero de Sanidad, Consumo y Gobernación, dejó un hueco libre en el equipo de Gobierno. Alberto Gaitán sustituyó a Guerrero y su puesto en la Consejería de Fomento y Turismo lo ha ocupado Ramírez.
A sus 34 años, Ramírez es la segunda persona más joven del equipo de Gobierno de la Ciudad Autónoma, solo por detrás de la medallista olímpica y consejera de Juventud y Deporte, Lorena Miranda. De hecho, si al PP solo le hubiesen ido las cosas un poco mejor en las elecciones de 2019, Ramírez hubiese sido diputado de la Asamblea desde el comienzo de la legislatura, dado que iba el décimo en las listas de los populares y estos obtuvieron 9 de 25 representaciones en la Asamblea.
Hemos quedado con el consejero en su despacho y al llegar tenemos que esperar unos minutos porque está atendiendo a un compañero de otro medio de comunicación. El día anterior también estuvo en directo la televisión pública local. Su reciente nombramiento no ha pasado inadvertido y todos queremos conocer, y daros a conocer, al nuevo consejero. Cuando pasamos a su despacho le preguntamos por esta cuestión para romper el hielo y sonríe tímidamente. Confiesa que sí, que parece ser que su nombramiento como consejero ha despertado más atención de la que él mismo esperaba y que, para no dejar de atender a ningún medio, cuadró su agenda para conceder todas las entrevistas casi seguidas.
Una vez hemos tomado contacto, llega el momento de la verdad, el motivo para el que nos hemos desplazado hasta la Consejería de Fomento y Turismo y el motivo por el que habéis decidido abrir este enlace. Encendemos la grabadora:
¿Tendremos Plan General de Ordenación Urbana en 2021?
El Plan General de Ordenación Urbana se encuentra en una fase en la que estamos pendiente de un informe de la Confederación Hidrográfica de Guadalquivir. Es cierto que en los últimos años ha habido muy buenas relaciones y ya se han remitido, por parte de la Ciudad, los estudios hidrográficos que han sido aprobados definitivamente. Ahora estamos en la última fase que es el trasvase de esos estudios a nuestro propio Plan. Los técnicos del área llevan varias semanas en contacto con la Confederación remitiéndole esa última documentación.
Si no hay ningún inconveniente, parece ser que todo va según lo previsto, en cuanto tengamos ese informe favorable, los incorporaremos a la memoria ambiental, que ya estuvo revisada por el Ministerio hace unos meses a falta del citado informe, y una vez este firmada ya los trámites que quedan dependen del Gobierno de la Ciudad. A mí, cuando los trámites no dependen de nosotros en exclusiva, no me gusta fijar plazos. No obstante, en la fase en la que está el Plan y con los trámites que le quedan, yo entiendo que debería llevarse a aprobación final antes de finales de año.
Por otro lado, más allá de la aprobación del Plan General de Ordenación Urbana, lo más importante es el desarrollo posterior. Nosotros ya estamos trabajando en ello. Estamos estudiando el Plan de Inversiones del siguiente año donde queremos hacer esa revisión de un significativo importe económico para actuar en muchas zona de urbanización que recoge el propio Plan.
Nuestro objetivo es tener en 2022 una partida presupuestaria específica que diga “Actuaciones relacionadas con el nuevo PGOU” porque tener un Plan aprobado sin tener avanzada la parte desarrollo, es volver a estar en la misma situación prácticamente.
Con respecto a Benzú y la Almadraba ¿Hay respuesta sobre su posible inclusión en el PGOU?
Lo que tengo entendido es que no hay respuesta concreta sobre ese tema porque son zonas que se encuentran fuera de ordenación urbana. Lo que sí está previsto, para no perder plazos, es que en la fase de aprobación provisional del Plan, el documento tiene remitirse al Ministerio de Fomento para su aprobación definitiva. Creo que es en ese momento cuando el Ministerio puede solicitar esa modificación puntual que haría falta para incluir estas barriadas dentro de ordenación urbana. En cuanto establezcamos los contactos con el Ministerio, que será a raíz del informe de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, volveremos a trasladar esta preocupación, porque me consta que ya lo saben. Ya se le trasladó en su momento al Ministerio la posibilidad de que pudiera modificarlo.
De todos modos, en la Almadraba tenemos ya un proyecto para el que ya contamos con todos los permisos y que consiste en una rehabilitación integral de la barriada, desde el cambio de solería o asfaltado hasta las luminarias.
El problema es que al ser zonas que no dependen exclusivamente de la Ciudad surgen estas complicaciones de que nos tienen que dar autorizaciones y los trámites se demoran muchas veces. Como Ciudad Autónoma, lo que dice nuestra Intervención es que si vamos a hacer una inversión en una zona que es competencia de otro organismo que es quien tendría que haberla hecho, hay que pedir una autorización para que nos dejen trabajar allí.
En este sentido, hemos montado un grupo de trabajo con Delegación del Gobierno, con Costas y Carreteras, al objeto de poder agilizar y darle un impulso a todos estos trámites. El caso de la Almadraba es un ejemplo de ello. Este proyecto está ya modificado en base a esas autorizaciones y ya debe estar en PROCESA en fase de licitación prácticamente para empezar las obras en unos meses.
El Colegio Oficial de Arquitectos de Ceuta ha señalado que, más allá del PGOU, Ceuta necesita una Ley de Suelo Específica ¿Está de acuerdo?
Hace unos meses mantuve una reunión con el decano del Colegio de Arquitectos, José María Mora, en la que también estuvo presente el presidente de la Ciudad, y hace unos días volvimos a reunirnos para seguir avanzando en una serie de objetivos que nos marcamos en el primer encuentro. Personalmente, le trasladé que ya con el anterior consejero, Alberto Gaitán, teníamos prevista una serie de modificaciones legislativas en ciertas normas que afectan a temas muy importantes como la propia Ley de Suelo o el trámite de licencias de apertura.
Las normativas son muy antiguas, pero la Ciudad no tiene competencia para modificarlas. Sin embargo, yo soy de la opinión de que aunque sea una cuestión que no dependa solamente de nosotros, sí podemos tener esa iniciativa legislativa de pedirle al Ministerio de Fomento la modificación de una serie de normas para conseguir, a su vez, una serie de objetivos.
Entonces, sí he acordado con el decano del Colegio de Arquitectos en trasladar esta idea que tenemos de buscar una serie de modificaciones legislativas en ciertos aspectos para poder iniciar los trámites y ponerlos en marcha. Nuestro objetivo no es solo la Ley de Suelo, sino también otros temas que afectan a la disciplina urbanística o las licencias de apertura. A partir de aquí, mantendremos una colaboración estrecha con el Colegio de Arquitectos para ir de la mano y aportar todas estas modificaciones en un solo documento remitido al Ministerio.
Es un problema que tenemos. Todas las Comunidades Autónomas tienen sus propias leyes de suelo y en Ceuta y en Melilla estamos con una de 1976. Y con las licencias de apertura pasa algo similar y se ha visto durante la pandemia. Hubo que agilizar muchos trámites y, mientras otras Comunidades con un Pleno modificaban sus normativas en cuestiones como las terrazas de hostelería, aquí nos encontrábamos con que modificar no podíamos y teníamos que buscar otras alternativas para poder flexibilizar. Yo soy de la opinión de que, aunque sea un asunto que lleve su tiempo, hay que hacerlo porque, al final, será un beneficio para todo el mundo.
Es habitual que en los plenos, los grupos de la oposición presenten propuestas o interpelaciones sobre actuaciones en barriadas de la ciudad. Aunque las hacen partidos distintos, el tono suele ser parecido e incluso se usan las mimas palabras: “abandono”, “desidia”, “olvido”… El Gobierno lo niega y explica, a grandes rasgos, que hay muchas necesidades que cubrir y recursos limitados ¿Cómo le explicaría esto a los/as vecinos/as de esas barriadas?
Yo entiendo a la gente. Cuando hay un problema en la barriada, el vecino lo que quiere es que se solucione cuanto antes. Pero también la Administración tiene una serie de trámites que cumplir y tenemos unos mecanismos instalados para que sean lo más ágiles posible, pero al final los plazos se tienen que respetar.
Creo que la Ciudad tomó una iniciativa acertada al inicio de legislatura con la creación de la Consejería de Medio Ambiente y Servicios Urbanos para que no solamente la Consejería de Fomento en sí se encargará de las actuaciones en todas las barriadas, sobre todo por el volumen de trabajo que supone. Servicios Urbanos, junto con la Sociedad Municipal Obimace, lleva haciendo una labor de diagnosis y detección de necesidades por todas las barriadas, siempre claro, teniendo en cuenta lo recursos que tenemos.
Además, para poder avanzar aún más, se aprobó el “Plan pyme” para que, en colaboración con empresas locales de la Ciudad, se fueran haciendo actuaciones en todas las barriadas de la ciudad. Hay proyectos que ya han salido y si están ejecutando y hay otros que tienen inconvenientes administrativos como el ejemplo de la Almadraba. En el Sarchal se acordó una actuación en la barriada y ocurre lo mismo, hay zonas en las que sí podemos actuar y zonas en las que tenemos que pedir los permisos correspondientes.
Creo que la forma de actuar y la estructura que tenemos funciona bien. Las obras menores las está desarrollando Servicios Urbanos, que está en contacto directo con la barriada y lleva ya un volumen muy importante de obras más otras tantas que están fase de tramitación. Las de mayor envergadura, que pueden llegar en torno al millón de euros, la está llevando a cabo PROCESA que tiene un mecanismo de contratación bastante ágil y que ya habrá gestionado una inversión de en torno a unos 6 o 7 millones de euros. Actuaciones de este tipo se han hecho en El Príncipe o en Alfau y también tenemos pendientes otras en San Amaro o la remodelación de La Sirena.
Por último, el Área de Fomento se encarga de proyectos que son todavía de mayor envergadura. Por ejemplo, tenemos un proyecto de remodelación integral del Polígono. También en Otero, sobre todo en conectividad, no solo a través del puente de Arroyo Paneque, sino también una mejora del entorno que permita mejorar la conexión entre las barriadas. Y un proyecto muy importante también que ya está en fase de poder iniciar los trámites de licitación es el de la Plaza Nicaragua. Es un proyecto muy demandado por los vecinos de Hadú y la plaza va a pegar un cambio brutal. De una parcela que está en muy malas condiciones se va a pasar a una plaza totalmente abierta, con local social, zonas de juego, zonas deportivas…
Uno de los objetivos del Gobierno de la Ciudad es dinamizar la zona portuaria y mejorar sus conexiones con el resto de la ciudad ¿Cómo se piensa llevar a cabo?
Esa primera actuación que hicimos de manera conjunta ahora la hemos potenciado con un protocolo que ha firmado la Consejería de Fomento y Turismo con la Autoridad Portuaria y que se centra en dos actuaciones principales:
Una de ellas tiene que ver con el área de Fomento y es aprobar un plan especial para permitir que las concesiones que hay en Cañonero Dato puedan llegar a tener un carácter comercial para intentar que, con el paso del tiempo, aquella zona se convierta en un enclave dinámico y comercial. A esta actuación le acompaña un proyecto inicial de urbanización para adecentar la zona, buscar esa integración posible con la Estación del Ferrocarril y hacer algún paso peatonal que permita también conectar con la estación marítima.
Estas actuaciones tienen por objeto dar los primeros pasos para que, poco a poco, el desarrollo de la propia actividad nos vaya marcando cómo va a quedar aquello. Eso lo irá marcando el tiempo, pero nosotros tenemos que dar estos primeros pasos para urbanizar la zona, darle mejor imagen, buscar esa posible integración y poner en marcha ese plan comercial. Insisto en que, al final, el tiempo nos irá diciendo cómo va a quedar aquello, pero aunque sea un proceso que lleve sus años los primeros pasos hay que darlos, como decíamos antes con la normativa de la Ley de Suelo. A lo mejor dentro de seis o siete años se convierte aquello en una gran zona comercial y, mira, ya sería algo que hemos ganado los ciudadanos. Eso no lo podemos predecir, pero sí podemos poner todas las condiciones necesarias para que pueda pasar.
La segunda parte del convenio tiene que ver con la parte turístico-comercial, donde estamos haciendo colaboraciones ahora, sobre todo, en cuanto al turismo náutico, dado que el Puerto tiene una presencia muy importante con el puerto deportivo y toda esa zona. Estamos trabajando conjuntamente para desarrollar actuaciones no solo de promoción, sino para que también Servicios Turísticos pueda prestar apoyo, por ejemplo, una atención específica en el puerto deportivo para que todo el que venga a través de embarcaciones encuentra allí una presencia física que le pueda informar de qué hacer o qué lugares visitar en la ciudad y, seguramente, este verano ya lo tengamos en marcha.
Aprovechando que ya nos metemos en área de Turismo ¿Tiene futuro Ceuta como destino turístico nacional ofreciendo, sol, playa y compras, como casi toda la costa andaluza?
Ceuta tiene atractivo como destino turístico porque tiene algo que tienen muy pocos sitios, una cualidad importantísima que, un destino que no la tenga tiene muy difícil desarrollarla y es que, en un territorio tan pequeño, podemos realizar cualquier tipo de turismo: turismo de playa, de naturaleza; turismo náutico-deportivo, castrense y también el producto de compras y gastronomías. Ceuta tiene todas las posibilidades en cuanto al tipo de turismo que podemos tocar.
Desde hace unos años, en Servicios Turísticos desarrollamos un Plan de Objetivos, en el cual nos marcamos una serie e actuaciones que hemos ejecutando y también adaptando a la pandemia. Empezamos por la parte de la organización interna de la sociedad y también introdujimos el turismo castrense como novedad y nos centramos en el turismo náutico-deportivo, sobre todo, a raíz de la pandemia, puesto que fueron los destinos que ofrecían esta posibilidad se convirtieron en prioritarios. Fue entonces cuando creamos el Plan Director Náutico que nos marca una serie de objetivos y actuaciones para seguir y, lo más importante, nos ofrece una comparativa con todo lo que se ha hecho en otras Comunidades Autónomas, lo cual nos permite ver dónde Ceuta puede desarrollarse en este tipo de turismo.
En esta línea, también vamos a llevar a cabo el dragado del Foso, que es una petición que nos hicieron a principios de legislatura los usuarios de las embarcaciones y también las empresas del turismo náutico. El proyecto está totalmente terminado y tiene un costo un poco más elevado por una cuestión de plazos ya que se trata de una zona muy sensible, dado que todas las embarcaciones de recreo pasan por allí. La actuación llega en torno a los 300.000 euros y lo que vamos a hacer es retirar la arena sobrante y nivelar toda la zona. Ya tenemos todo listo para sacar esta actuación a licitación que se tiene que desarrollar en un máximo de quince días, por ello, hablaremos con los concesionarios de embarcaciones para conocer en qué periodo concreto queremos actuar.
Por otro lado, estamos haciendo una serie de proyectos de rehabilitación de puntos de interés turísticos. Actualmente, la Consejería de Medio Ambiente y Servicios Urbanos ya está trabajando en La Sirena. La idea es destinar este enclave para el trabajo de biólogos y el tema medio ambiental porque se trata de una zona que tiene que estar protegida y conservada. No obstante, habíamos pensado, en colaboración con una asociación de avistamiento de aves, ya que la parte alta podríamos destinarla a un observatorio de aves. Desde Gibraltar, varios operadores nos han insistido en que existe una gran afición a avistamiento de aves y que Ceuta es un punto estratégico en todo el mundo. También se está desarrollando otro proyecto, que depende de fondos del Ministerio, que consiste en la remodelación de las zonas del Hacho y García Aldave, así como los fuertes que hay por toda la ciudad, para poner estas zonas en valor como atractivo turístico.
En cuanto al turismo de compra y gastronomía, también es un campo importante que estamos potenciando. Hemos sacado un concurso de actualización de todas las guías turísticas incluyendo también la nueva marca de Servicios Turísticos que, aunque nos pillo toda la pandemia, la pudimos presentar.
Hablando de la nueva marca ¿Qué la hace diferente a las anteriores?
Yo soy de la opinión de que este tipo de cosas tienen que hacerlas profesionales, personas y que se dedican al diseño de marcas corporativas. Por eso, decidimos que, a diferencia de otros concursos que hace la Ciudad, como por ejemplo para carteles de eventos, el de la marca de Servicios Turísticos tenía que tener como uno de sus requisitos que solo pudieran presentarse profesionales y empresas del sector. Además, el jurado también tenía que estar compuesto por profesionales y personas que entendieran sobre diseño. Yo creo que por haberlo hecho de esta forma, la marca nos va a durar más en el tiempo. Además, el ganador del concurso nos dejó un dossier muy completo con múltiples posibilidades para explotar la marca.
Volviendo a los nichos de turismo. Hay ciudades o pueblos que se han dado a conocer nacional e internacionalmente por acoger eventos anuales como festivales de música, festivales de cine u otro tipo de eventos. Es decir, no solo tienen garantizada la afluencia de cientos o miles de personas en unas fechas concretas del año, sino que gozan del reconocimiento y la promoción que ofrecen estos eventos. ¿Podría ser esta una alternativa para Ceuta?
Nosotros hemos estado trabajando en esta línea, sobre todo antes de la pandemia, con el objetivo de atraer turismo de congresos. Los organizadores al final lo que buscan es un sitio que ofrezca comodidades y Ceuta tiene un atractivo muy importante: cualquier persona puede venir sin necesidad de traer vehículo. Te puedes quedar en cualquier hostal, hotel o apartamento y prácticamente por toda la ciudad sin un vehículo. Es cierto que Ceuta tiene limitaciones de espacio, pero hay zonas que se pueden acondicionar, como las Murallas Reales que cada vez que se ha hecho un concierto se han llenado e incluso ha venido gente de fuera a ver a algún artista.
En el contrato del tour-operador que tenemos para adjudicar hay una cantidad muy importante relacionada con el plan de promoción exterior, creo que es una de las apuestas más fuertes que se ha hecho en los últimos años económicamente hablando. En el Plan de Medios damos la posibilidad al adjudicatario de que nos pueda ofrecer cualquier iniciativa en esta dirección, no solo en cuanto a congresos, festivales o eventos, sino, por ejemplo, si hay un programa de televisión relacionado con el turismo y de alcance nacional…
Este tipo de iniciativas no solo es que te permitan traer a gente, sino que el impacto visual y de promoción que tienen en redes sociales y en medios de comunicación es enorme.
¿Cuál son los objetivos de la Ciudad en una Fitur marcada por la pandemia y las restricciones?
Como objetivos para la feria hemos adoptado varios. Uno es la adaptación al ámbito audiovisual porque con las restricciones que habrá en cuanto a la afluencia de personas creemos que la presencia online va a ser muy importante, de ahí que hayamos tenido que hacer modificaciones en relación a lo que se venía haciendo otros años para poder desarrollar cualquier tipo de reuniones, videoconferencias, foros, etc., sin ningún tipo de problemas. Otro es el lanzamiento de la nueva marca de Servicios Turísticos, “Donde surgen las emociones”, para ello, ya tenemos contratado todo lo necesario para su puesta en marcha en Fitur. También queremos poner en marcha el contrato con el tour-operador que nos permita hacer allí un lanzamiento tanto desde el punto de vista exterior, como desde la comercialización de cualquier paquete turístico.
Por otro lado, como no podía ser de otra manera, intentaremos que aquellas entidades que organizan pruebas deportivas de interés nacional o los grandes operadores turísticos de nuestra ciudad tengan presencia allí, siempre dependiendo de las restricciones que se impongan. Fitur, al fin y al cabo, tiene orientados sus 4 o 5 primeros días a profesionales del sector y se pueden establecer muchas relaciones, firmar convenios, etc., y todas estas entidades nos dan mayor visibilidad y mayor presencia.
Otra cuestión importante son las relaciones con Tour-España, con quienes llevamos meses fortaleciendo vínculos y ahora vamos a participar con ellos de forma bilateral, junto a otras Comunidades Autónomas de cara a vender el destino España y, en nuestro caso, el destino Ceuta, como destinos de turismo seguro. En Fitur todos los años tenemos reuniones con ellos de cara a la planificación de la promoción exterior que ahora mismo está muy parada a consecuencia de la pandemia.
Por último, no podemos olvidar otro aspecto fundamental que es el convenio de colaboración que tenemos firmado con la Junta de Andalucía y que no se pudo desarrollar al 100% porque las prioridades, evidentemente, cambiaron con el coronavirus. Tenemos la ubicación del stand de Ceuta justo a la entrada del stand de Andalucía que es uno de los más importantes de Fitur, pero además queremos retomar medidas de colaboración que teníamos en fase de desarrollo antes de la pandemia, como bonos turísticos entre ambas comunidades o desde el punto de vista de los canales de difusión. Desde Ceuta buscamos que Andalucía nos pueda servir como punto de referencia por los canales de difusión que tiene que son importantísimos.
El turismo necesita hoteles y los hoteles necesitan personal ¿Qué va a pasar con el Hotel Puerta de África y con su personal?
Las líneas que se han estado siguiendo desde esta último año son, primero, como se trata de personal de la Administración, buscar una fórmula jurídica para que puedan prestar servicios en otras áreas de la Administración local como hacen, por ejemplo, Amgevicesa u Obicamce, y así poder conservar los puestos de trabajo.
En segundo lugar, desde el punto de vista turístico, consideramos que Ceuta tiene poca capacidad hotelera y sería una pena que unas infraestructuras como las del Hotel Puerta de África no se explotasen. Lo que se ha pensado es buscar una fórmula para que algún operador externo pueda gestionar el hotel y desarrollar el servicio como actividad hotelera. Eso está estudiándose a través de PROCESA que está haciendo un estudio con asesoramiento externo en cuanto a los pliegos de condiciones y demás.
El objetivo es no perder capacidad hotelera y, a la vez, mantener al personal del Puerta de África porque es personal de la Administración.
¿Ha suscitado interés el hecho de que la Ciudad esté explorando licitar la gestión del Hotel?
Sí. Desde que se ha empezado a hablar de que se va a licitar y demás ha habido cadenas de hoteles y empresarios locales que se han interesado y nos han preguntado por los plazos. Me imagino que ese interés será porque pretenden presentar posibles ofertas.
No podemos cerrar el capítulo de turismo sin hablar de la frontera ¿Qué pinta en el futuro turístico de Ceuta?
Este es un tema que conozco en profundidad y en el que creo que hay que ser realistas. El cierre de la frontera a uno de los sectores que más ha afectado ha sido al turismo y esto no es una percepción mía, son datos objetivos. Si cuando la frontera estaba abierta, te ibas a la ocupación hotelera de todos los establecimientos de Ceuta, los fines de semana estaban al 90% y, de ese porcentaje, el 80% eran turistas marroquíes. Incluso se tenía constancia en la frontera porque mucha de la gente que venía, entraba con visado y reserva hotelera.
En mi opinión personal, Marruecos, desde el punto de vista turístico, sigue siendo una oportunidad que Ceuta tiene que intentar no desaprovechar y a los datos me remito. Si Ceuta antes era un atractivo turístico para Marruecos, va a seguir siéndolo y más si seguimos avanzando en el desarrollo de la ciudad.
Pero, en este caso, parece que es Marruecos quien no está por la labor de permitir la entrada de turistas a Ceuta a través del Tarajal…
Evidentemente no es algo que dependa en exclusiva de nosotros y si Marruecos quiere impedir por completo que pase ningún turista puede hacerlo, pero yo creo que las cosas no tienen por qué ser así, también se trata de generar necesidad.
Si nosotros somos capaces de mantener ese atractivo que Ceuta ya tiene para muchos marroquíes que venían aquí a pasar el fin de semana, se genera necesidad entre esas personas de querer venir a Ceuta. Y, como decía antes, si seguimos avanzando en el desarrollo de la ciudad, esa necesidad puede verse incrementada.