Mujeres Anónimas, una organización sin ánimo de lucro dedicada a apoyar a familias con escasos recursos, ha retomado su tradicional mercadillo solidario en el colegio Ramón y Cajal, ubicado en San José-Hadú. Este evento, que celebra su cuarta edición, marca un regreso significativo tras el parón provocado por la pandemia de Covid-19.
El mercadillo estará abierto hasta las ocho de la tarde, ofreciendo a los visitantes una variedad de actividades y experiencias gastronómicas. La entrada es libre, pero se anima a los asistentes a contribuir con donaciones que serán destinadas a causas benéficas locales.
Hanan Abderrahman, portavoz de Mujeres Anónimas, expresó su entusiasmo por el retorno del mercadillo: «Es una oportunidad para que la comunidad se una en un acto de solidaridad, disfrutando de buena comida y entretenimiento mientras apoyamos a quienes más lo necesitan».
El evento cuenta con una amplia gama de puestos que ofrecen desde productos artesanales hasta delicias culinarias preparadas por voluntarios. Además, hay actividades para niños y actuaciones en vivo que garantizan un día lleno de diversión para toda la familia.
La organización espera superar las cifras de recaudación de años anteriores, gracias al apoyo continuo de la comunidad y la participación de nuevos colaboradores. «Cada pequeño gesto cuenta, y juntos podemos hacer una gran diferencia», añadió Abderrahman.
El mercadillo no solo es una fuente de recaudación de fondos, sino también una plataforma para concienciar sobre la importancia de la solidaridad y el apoyo mutuo en tiempos difíciles. Mujeres Anónimas planea seguir organizando este tipo de eventos para continuar su labor social y extender su impacto positivo en la comunidad.
Con iniciativas como esta, Mujeres Anónimas demuestra que la unión y la colaboración pueden transformar vidas, brindando esperanza y recursos a quienes enfrentan dificultades económicas. El mercadillo solidario es un ejemplo inspirador de cómo la comunidad puede unirse para lograr un bien común.