Por segundo año consecutivo no podemos disfrutar, con toda su amplitud y esplendor, desde la perspectiva religiosa, cultural, artística, o emocional, de las actividades que se programan para conmemorar el Triduo Pascual, pues así nos lo exige la situación sanitaria que vivimos.
Consecuentemente, tampoco las Unidades de la guarnición de Ceuta podrán colaborar con las hermandades y cofradías con las que mantienen su tradicional y afectuoso vínculo, procesionando con sus titulares y sintiendo el calor y aprecio de nuestros convecinos, por las calles de nuestra ciudad.
Será éste pues, otro año en el que debemos transformar la expresión o devoción colectiva en íntima y recogida reflexión individual desde cada una de las diferentes ópticas.
No obstante, aprovecho esta tribuna que generosamente me ofrece este medio, para desear a toda la Diócesis de Ceuta, a la comunidad cristiana con sus hermandades y cofradías, a todos los cofrades, y a todos los ceutíes, una bienaventurada Semana Santa, y que pronto podamos retomar la normalidad sanitaria, social y económica, y con ella la brillantez de este tiempo Pascual.
Un afectuoso saludo, en nombre de todos los componentes de la Comandancia General de Ceuta.