El presidente del Gobierno ha comparecido ante el Congreso de los Diputados para explicar la declaración conjunta en la etapa de nuevas relaciones entre entre España y Marruecos. Asimismo, el socialista ha reivindicado que el Gobierno no acepta que se hable de Ceuta y Melilla como ciudades ocupadas y que la soberanía española de las dos ciudades autónomas «está fuera de toda duda»
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha comparecido esta mañana en el Congreso de los Diputados para hablar sobre el nuevo partenariado para el siglo XXI que estableció en su visita a Rabat y las consecuencias que ello ha ocasionado en la relación con Argelia. Asimismo, el socialista ha explicado la declaración conjunta en la etapa de nuevas relaciones entre España y Marruecos. El pasado 30 de marzo avanzó los criterios generales que guiaban los primeros pasos previstos por el Gobierno de España para desbloquear el diálogo con el país vecino y dotarlo de un «nuevo impulso decidido». Con ocasión del viaje de Sánchez a Marruecos a invitación del Rey Mohamed VI el pasado 7 de abril, los gobiernos de España y Marruecos sustanciaban la voluntad de un nuevo marco de entendimiento y estabilidad adoptando esta declaración conjunta.
En primer lugar, dando un especial protagonismo a la transparencia y la comunicación permanente con el objetivo de que siempre haya entre ambos un canal abierto «para aclarar cualquier malentendido y preservar la confianza».
En segundo lugar, reafirmando la vigencia y la integridad de todos los acuerdos entre ambas partes. Sánchez, en esta ocasión, ha enumerado a los que sentaron en el pasado las bases de las relaciones entre España y Marruecos, también a los que fijan las fronteras, los que ya establecen mecanismos de cooperación avanzada y los que en el futuro puedan negociarse.
Por último, el compromiso de respeto mutuo por el que, en el discurso y en el práctica, el Gobierno quiere evitar «todo lo que ofende a la otra parte». «Nosotros no aceptamos que se hable de Ceuta y Melilla como ciudades ocupadas porque son territorio español, son territorio europeo internacionalmente reconocido. También hemos de entender que Marruecos merece la misma consideración cuando hablamos de los asuntos que a ellos les preocupan», ha reivindicado el socialista.
La declaración conjunta construye, para el Gobierno de España, un sistema de garantía sobre la integridad territorial. «La soberanía española sobre Ceuta y Melilla está fuera de toda duda como en cualquier otra parte del territorio nacional», ha reiterado Sánchez. La buena vecindad adquiere especial protagonismo como un modelo de normalidad «beneficioso para todos». «Las dos ciudades autónomas no pueden vivir y desarrollarse con la presión de la excepcionalidad permanente y la precariedad», ha aclarado el presidente del Gobierno, que ha explicado que esto significa normalizar plenamente el paso de las personas y mercancías. «Ambas partes acordamos el restablecimiento inmediato de todas las conexiones marítimas, la apertura gradual de los pasos fronterizos y la preparación de la Operación Paso del Estrecho«, ha enumerado el del PSOE, que ha asegurado que todo esto ya está en marcha.
El Gobierno de la Nación se posiciona a favor en que las aduanas en Ceuta y Melilla funcionen en régimen de expedición comercial. El comercio «regular y regulado, transparente», conforme a los más exigentes estándares internacionales es, para Sánchez, «la mejor manera de que no vuelva el comercio atípico«. Y los operadores económicos de España y Marruecos, asegura, serán quienes elijan cuál es la mejor vía para esas transacciones comerciales. «Lo que vamos a hacer es asegurar que se cumple la legalidad y que tenemos los instrumentos aduaneros necesarios para regular debidamente el tráfico normal de personas y de mercancías», ha precisado.
Las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla tienen para el Gobierno una «clara vocación de prestar servicios» a las empresas españolas que, cada vez, invierten y comercian más con Marruecos y con el resto del continente africano, para lo que el presidente asegura que esto solo será posible con un marco de legalidad fronteriza. Asimismo, recuerda harán falta también otros elementos como el reforzamiento de la Administración General del Estado, la frontera inteligente, las inversiones asociadas al marco del nuevo modelo económico y en un «futuro esperanzador» para los habitantes de las ciudades autónomas que han empezado ya a materializarse.
El gobierno socialista se ha comprometido a relanzar y reforzar la cooperación en el ámbito de la migración. La gestión de las migraciones es otro de los desafíos conjuntos que tiene el continente africano y la Unión Europea. «España no va a tolerar la instrumentalización de la tragedia de la migración irregular como arma de presión, el mejor instrumento es la cooperación internacional para una gestión ordenada de los flujos migratorios«, ha puntualizado
El presidente del Gobierno ha asegurado que la agenda económica bilateral y las infraestructuras de enlace que conectan a los dos países van a ocupar una parte creciente de su atención, con el fin de alejarse de las acciones unilaterales, así como reactivar el grupo de trabajo de delimitación de espacios marítimos. El balance, aunque provisional, que ha hecho Sánchez sobre esta declaración conjunta es positivo.