La semana del del 16 al 22 de septiembre ha cerrado con un deleznable balance en lo que asesinatos machistas se refiere. Nada menos que seis mujeres asesinadas, de las que solo cuatro serán consideradas víctimas de violencia de género. El último asesinato ocurrió el domingo 22, dos días después de la marcha feminista conocida como «Noche Violeta».
La «Noche Violeta» surgió como respuesta al mes de julio de 2019, un mes en el que el número de víctimas mortales de violencia de género ascendió a nueve mujeres. Pues bien, en la misma semana en la que tuvo lugar la concentración -el día 20 de septiembre– cuatro mujeres han sido asesinadas por sus parejas o ex-parejas. Cuatro víctimas a las que hay que añadir a la madre y a la hermana de una de ellas, que también fueron asesinadas, pero que, sin embargo, debido a la legislación actual, no se consideran víctimas de violencia de género.
En lo que va de año ya son 44 las mujeres asesinadas por sus parejas o ex-parejas y dos niños que también fueron asesinados por su padre (los hijos en común sí se contabilizan como víctimas de violencia de género según la legislación actual). El pasado año de 2018 fueron asesinadas un total de 48 mujeres víctimas de episodios de violencia de género. Lamentablemente, todo apunta a que 2019 cerrará el ejercicio con un volumen mayor. A todo esto hay que añadir que en lo que va de año son casi 40 los menores que han quedado huérfanos de madre (y en algunos casos también de padre, al suicidarse este tras cometer el crimen).
La Ciudad y Delegación han vuelto a repetir una estampa que tristemente se está convirtiendo en rutinaria. Ambas instituciones han convocado hoy sendos minutos de silencio a las 12.00 horas.