La planificación de la explotación eólica marina, uno de los puntos clave de los POEM, sigue suponiendo una seria amenaza en zonas clave para la biodiversidad, si se tiene en cuenta el documento elaborado por SEO/BirdLife para compatibilizar el desarrollo eólico marino y la biodiversidad
El Gobierno de España ha identificado algo menos de 5.000 kilómetros cuadrados del espacio marítimo como zonas de alto potencial para el desarrollo de instalaciones de eólica marina. Aunque, en conjunto supone un 0,46% del total, SEO/BirdLife muestra su preocupación por el solapamiento entre estas zonas y espacios protegidos o de alto valor ecológico, especialmente en la demarcación Noratlántica, que concentra el 54% del espacio reservado a la eólica offshore en España. La ONG ambiental pide que se resuelvan estos desajustes, y apela a todas las partes implicadas para que el despliegue renovable en el mar se desarrolle con planificación y precaución, evitando afecciones a la valiosa biodiversidad marina del país.
Cada año, en otoño y primavera, se producen millones de movimientos de aves marinas en las costas españolas. En concreto, el corredor que se forma en las costas de Galicia y Asturias se considera uno de los pasos migratorios más importantes del planeta, y no solo por el paso de aves marinas, sino también porque esta zona es atravesada por millones de aves terrestres en sus migraciones para atravesar la península ibérica, a menudo por la noche. Tanto es así que es preciso seguir investigando para poder llegar a dimensionar su relevancia, especialmente durante el paso otoñal y para concretar la presencia de especies invernantes.
Al igual que ocurre en tierra firme, un desarrollo renovable mal planificado puede generar impactos críticos sobre especies ya de por sí en peligro: las aves marinas representan el grupo de avifauna más amenazado del planeta, y a ello se suman la complicada situación de especies de cetáceos, tortugas y otros organismos marinos, y los problemas que afrontan diversas pesquerías. Además, como ocurre con la agricultura, la ganadería y otros usos en tierra, el despliegue de la energía offshore tiene el reto de convivir con otros usos del mar y, de manera especial, con la actividad pesquera.
El Gobierno de España ha querido ordenar el despliegue eólico, de hasta un máximo de 3 gigavatios a 2030, delimitando zonas de alto potencial para el desarrollo de la energía eólica marina (ZAPER) en los planes de ordenación del espacio marítimo (POEM) aprobados ayer en el Consejo de Ministros.
SEO/BirdLife, que viene abogando por unas renovables responsables desde la implantación del primer parque eólico en España, en 1993 y en medio de otro corredor migratorio de gran importancia, el del Estrecho de Gibraltar, muestra su preocupación por la ubicación de algunas de estas ZAPER y pide al Ejecutivo:
Evitar solapamientos con zonas consideradas relevantes para la biodiversidad
Se han propuesto ZAPER que limitan con zonas protegidas para las aves y, que, por tanto, deberían quedar excluidas del desarrollo offshore. Un ejemplo: el Ejecutivo ha eliminado una ZAPER inicialmente propuesta en Menorca, que podría afectar al ave marina más amenazada de Europa, la pardela balear. Sin embargo, mantiene otras dos ZAPER contiguas, en las que la afección a la especie sería la misma o, incluso, mayor.
Al tiempo, la Demarcación Noratlántica la ZAPER NOR-8, situada en Asturias, se ha ubicado dentro de un espacio de la Red Natura 2000, considerada en el propio documento de los POEM como zona prioritaria para la protección de la biodiversidad. Además, hay otras ZAPER de esta demarcación situadas dentro de los límites de «Áreas valiosas o de interés para hábitats y especies de interés comunitario (LIC) y para aves en la demarcación».
España tiene el compromiso y la obligación de proteger al menos el 30% de su superficie marina. Actualmente, solo tiene el 12% y debe tenerse en cuenta que estos espacios protegidos son en muchos casos zonas de alimentación de las que las aves entran y salen, por lo que instalar parques en sus límites puede poner en riesgo las poblaciones de aves y la propia integridad de los espacios.
Aprovechar el trabajo hecho, pionero en Europa
España fue pionera en la declaración de zonas marinas protegidas y, también, en la identificación de zonas candidatas para la energía eólica. En 2009, de hecho, el Gobierno publicó una zonificación que especificaba zonas de exclusión, zonas con condicionantes y zonas aptas, que desde entonces no había sido actualizada. SEO/BirdLife considera relevante revisar y actualizar dicho mapa en base a la información generada desde entonces, pero la forma en que se ha tratado en los POEM es muy poco clara: más allá de definir las ZAPER, se presenta una zonificación equivalente a la de 2009, con «zonas de prohibición» (rojas), «zonas de restricción» (amarillas) y «zonas libres» (verdes), que no tienen nada que ver con las del mapa publicado en aquel momento. Se ha hecho sin haber derogado dicha zonificación previa y sin existir un criterio claro acerca de cómo se han definido estas nuevas zonas. Es esencial aportar claridad en este sentido y, entre otros aspectos, garantizar un impacto mínimo sobre la biodiversidad marina.
Tener en cuenta la afección a las aves marinas
España tiene una plataforma continental muy profunda y, por ello, se prevé que la mayoría de la energía eólica marina sea flotante. Se trata de una tecnología innovadora en desarrollo, pero, por el momento, hay escasas instalaciones operativas en el mundo, y no existen experiencias previas en aguas españolas. En consecuencia, es preciso recabar más información para evitar que los aerogeneradores provoquen impactos críticos o irreversibles sobre la avifauna marina. ¿Cómo hacerlo? Primero, con proyectos piloto de pequeño tamaño, precedidos de estudios de avifauna in situ. Segundo, y con toda la información recabada, junto a la ya existente, generando mapas de sensibilidad ambiental que ayuden a concretar las zonas donde sí y donde no es compatible con la biodiversidad instalar eólica offshore a gran escala
Dentro de su campaña «Renovables Responsables», SEO/BirdLife ha elaborado un documento para compatibilizar el desarrollo eólico marino y la biodiversidad. Cuenta con 20 recomendaciones, un anexo con zonas que deberían ser excluidas y un listado de los potenciales efectos adversos de esta tecnología sobre las aves marinas. Este documento ha sido compartido con las administraciones públicas y el sector.
La ONG ambiental confía en que, en la tramitación individual de cada proyecto, tantos las instituciones públicas como los promotores velen por la protección del rico patrimonio natural de las costas españolas.