La empresa municipal de limpieza de Ceuta, Servilimpce, atraviesa una situación complicada con más de 70 empleados en bajas laborales. La dirección aún no ha definido un plan concreto para sustituir a los trabajadores afectados, lo que podría afectar el servicio de limpieza en la ciudad en las próximas semanas
La empresa municipal de limpieza de Ceuta, Servilimce, que gestiona el mantenimiento y la limpieza urbana en la ciudad, está enfrentando serias dificultades debido a la alta cantidad de empleados en situación de baja laboral. Actualmente, más de 70 trabajadores se encuentran fuera de servicio, lo que ha generado una gran preocupación tanto en la empresa como en los usuarios del servicio, debido a la posible afectación en la calidad de la limpieza en las calles de Ceuta.
Servilimpce, que comenzó sus operaciones hace relativamente poco tiempo, no ha podido establecer aún un protocolo claro para gestionar la sustitución de los trabajadores que están de baja, lo que ha generado incertidumbre sobre la manera en que podrán cubrir estas ausencias. La plantilla de la empresa ya ha expresado su inquietud por el creciente número de bajas, mientras que desde la gerencia de Servilimpce aseguran estar trabajando contrarreloj para encontrar una solución efectiva que minimice el impacto en los servicios de limpieza.
Fuentes cercanas a la empresa han señalado que la situación es crítica, ya que la ausencia de 70 empleados supone un porcentaje significativo de la plantilla, lo que dificulta mantener los niveles habituales de cobertura y eficacia en la limpieza de las calles y espacios públicos. Hasta el momento, la dirección de Servilimpce no ha concretado si optarán por contratar temporalmente personal adicional o si reubicarán a trabajadores en diferentes turnos para cubrir las zonas más afectadas.
La empresa, que gestiona la limpieza urbana en una ciudad de más de 85.000 habitantes, está en una encrucijada. El desafío de cubrir la ausencia de 70 trabajadores es considerable, pero se espera que, en los próximos días, se puedan adoptar soluciones que mitiguen las posibles consecuencias sobre el servicio. Los ciudadanos, mientras tanto, observan atentos a la evolución de la situación, preocupados por el mantenimiento adecuado de su ciudad.