Desde el Sector de Servicios a la Comunidad de UGT SERVICIOS PÚBLICOS, no entramos al trapo de descalificaciones infundadas para hacerse propaganda y autobombo que utilizan determinados grupúsculos, ante su incompetencia, ignorancia e irrelevancia, pero por única vez y sin que sirva de precedente, vamos a poner los puntos sobre las íes en este pseudocomunicado enviado a la prensa por ese minigrupúsculo de nostálgicos franquistas y ultraderechistas que pretenden con burda torpeza intentar mancillar el nombre de una organización que lleva Ciento Treinta y Cuatro Años, conquistando derechos para los trabajadores: la Unión General de Trabajadores y por ende de nuestro compañero Juan Gutiérrez como Presidente del Comité de Empresa de Trace al que han pretendido insultar y vejar estos impresentables por pura envidia hacia la gran labor que Juan ha desarrollado y sigue desarrollando tanto en Trace como en el conjunto de la UGT.
No vamos a entrar en las falacias que pretenden verter con su remedo de comunicado estos que todos conocemos, cuyo único objetivo guiados por su necedad y estulticia es sembrar el odio en una sociedad en paz y que ahora pretenden disfrazarse de sindicalistas con un nombre lo más alejado de sus intenciones poniendo como mascarón de proa a un tonto útil, cuyo único objetivo es vivir sin trabajar, como buenos alumnos nostálgicos del franquismo, cuyo objetivo es mediante engaños volver a los tiempos en que unos cuantos vividores le chupaban la sangre a los trabajadores.
Sepan que en su disfraz político o sindical pueden engañar durante un tiempo a gente inculta o malvada que desconoce lo que es vivir bajo la bota del fascismo, pero que finalmente, al salir a la palestra y mostrar a la opinión pública se verdadero rostro de vividores que pregonan el odio a todo lo que se oponga a la intolerancia hacia el diferente, la sumisión de género y en general a los valores democráticos que nos ganamos para acabar con aquella aberrante y sanguinaria dictadura, las trabajadoras y trabajadores, ya sean de Trace, o de cualquier otra empresa que con su esfuerzo han logrado cotas inimaginables de bienestar lo mantendrán a pesar de que a estos personajes de poca monta, zafios y vagos, les gustaría que volviéramos a los tiempos en que el barrendero o el cartero tenía que ir de casa en casa con una estampita pidiendo el aguinaldo navideño porque el miserable sueldo que les ofrecía el régimen del Dictador no les alcanzaba para las mínimas necesidades.
Desde UGT mostramos nuestro apoyo unánime hacia el compañero Juan Gutiérrez por los valores de los que ha hecho gala a lo largo de estos años y a su labor incansable en favor de las mejoras en las condiciones de los trabajadores. A estos que mancillan una palabra tan hermosa como solidaridad solo le podemos mostrar nuestro desprecio.