CaixaBank ha decidido nombrar a Tomás Muniesa como su nuevo presidente, reemplazando a José Ignacio Goirigolzarri, quien ha presentado su renuncia voluntaria. Muniesa, quien actualmente ocupa el puesto de vicepresidente, asumirá oficialmente el cargo el 1 de enero de 2025. A partir de entonces, la presidencia del banco dejará de tener funciones ejecutivas, según informó la entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Goirigolzarri ha sido una figura clave en CaixaBank desde 2021, cuando la entidad absorbió a Bankia. Su liderazgo fue crucial durante la integración de ambas entidades, creando así el mayor banco del mercado español. Durante su mandato, Goirigolzarri fue responsable de áreas como la secretaría del consejo, comunicación externa, relaciones institucionales y auditoría interna.
La salida de Goirigolzarri coincide con el final de un ciclo estratégico para CaixaBank, que planea presentar su nueva hoja de ruta para 2025-2027 en noviembre. Este cambio también se alinea con las recomendaciones del Banco Central Europeo (BCE), que aboga por una clara separación entre las funciones ejecutivas y no ejecutivas en los bancos bajo su supervisión.
El BCE ha expresado su preocupación por la concentración de poder en las presidencias ejecutivas dentro del sector bancario español. Recientemente, publicó un borrador sobre gobernanza que impulsa un modelo donde los presidentes se centran exclusivamente en la supervisión de los equipos directivos. Este modelo es poco común en la eurozona, pero prevalece en los grandes bancos españoles como Santander, BBVA y CaixaBank.
Ángel Simón, consejero delegado de Criteria, accionista de CaixaBank, ha manifestado su apoyo a las directrices del BCE, indicando que seguirán la línea de separación de funciones propuesta por el banco central.
Por otro lado, Goirigolzarri, nacido en Bilbao en 1954, tiene una extensa trayectoria en el sector bancario. Comenzó su carrera en 1977 en el Banco de Bilbao y ascendió a posiciones de liderazgo en BBVA antes de convertirse en presidente de Bankia en 2012. Durante su tiempo en Bankia, jugó un papel crucial en el saneamiento de la entidad tras recibir un rescate financiero significativo.
Con 70 años, Goirigolzarri se retira de la primera línea de mando, dejando un legado de transformación y consolidación en el sector bancario español. Su sucesor, Tomás Muniesa, enfrentará el desafío de liderar CaixaBank en un entorno regulatorio cada vez más exigente y en constante evolución.