La saga de acción protagonizada por Tom Cruise no solo es conocida por sus escenas arriesgadas, sino también por una tragedia ocurrida durante el rodaje de su segunda entrega. Mark Connolly, un experimentado doble de acción australiano, fue víctima de un grave accidente en 1999 que terminó en una dura batalla legal y un desenlace fatal.
Connolly, de 44 años, sufrió un accidente mientras filmaba una escena en la que interpretaba a un guardia. Fue atropellado por una motocicleta en pleno rodaje, fracturándose la clavícula, el cuello y sufriendo daños en la movilidad de un brazo. Tras el incidente, inició un proceso judicial contra Billy Burton, director de la segunda unidad y representante de Paramount Pictures, denunciando negligencia por la falta de señales de advertencia para evitar el impacto.
Después de años de lucha legal, en 2007 el Tribunal de Nueva Gales del Sur falló a favor de Connolly, otorgándole una indemnización de más de un millón de dólares (1.018.253 USD). Sin embargo, la victoria fue amargamente efímera: horas después de recibir la compensación, Connolly falleció a causa de un cáncer de páncreas.
El juez en el caso destacó que Burton había priorizado la velocidad en la filmación por encima de la seguridad, omitiendo ensayar la escena y poniendo en riesgo la vida de los involucrados. Esta negligencia marcó para siempre el rodaje de ‘Misión: Imposible II’ y dejó una sombra sobre una de las películas menos apreciadas de la franquicia.
