Un trágico suceso ha conmocionado a la comunidad del monasterio del Santo Espíritu del Monte en Gilet, Valencia. Un hombre, aún no identificado, atacó a varios miembros de la congregación, resultando en la muerte de un religioso de 76 años y dejando a otros tres heridos.
El Arzobispado de Valencia confirmó el fallecimiento del religioso y expresó su profundo dolor por el ataque. Según fuentes oficiales, el aviso del incidente se recibió a las 10 de la mañana, momento en el que los servicios de emergencia acudieron al lugar para asistir a las víctimas.
El Centro de Información y Coordinación de Urgencias informó que el religioso fallecido sufrió un traumatismo craneoencefálico y fue trasladado al Hospital Clínico, donde lamentablemente perdió la vida. Los otros tres hombres, de 57, 66 y 95 años, fueron atendidos por contusiones y traumatismos.
La Guardia Civil ha desplegado un operativo de búsqueda en los montes cercanos al monasterio para localizar al agresor. Este acto de violencia ha generado una gran preocupación en la comunidad local, que se encuentra en estado de alerta.
En un comunicado, la institución religiosa condenó enérgicamente la agresión y expresó su solidaridad con los afectados. «Nos unimos al sufrimiento de los hermanos, con las lesiones en el cuerpo y el dolor en el alma por lo vivido, que, sin duda, deja profunda huella en las personas», manifestaron.
Además, hicieron un llamado a la reflexión y a la vigilancia dentro de sus comunidades para evitar futuros incidentes. «Pedimos también por el agresor para que sea consciente del daño y sea capaz de rectificar un comportamiento para nada propio de la condición humana», añadieron.
Este trágico evento ha puesto de manifiesto la necesidad de reforzar las medidas de seguridad en los lugares de culto y de fomentar un ambiente de paz y respeto mutuo. La comunidad religiosa de Gilet se encuentra ahora en un proceso de duelo y reflexión, buscando maneras de sanar y prevenir futuras tragedias.
Mientras tanto, las autoridades continúan trabajando arduamente para esclarecer los hechos y llevar al responsable ante la justicia. La comunidad espera que este lamentable suceso sirva como un recordatorio de la importancia de la seguridad y la convivencia pacífica.