Tras las últimas protestas que han protagonizado trabajadores de la plantilla de la empresa de autobuses Hadú-Almadraba, UGT se suma a las demandas de municipalización de la empresa. Una propuesta que han demandado también desde CCOO e incluso desde el PSOE de Ceuta
Parece que el horizonte sigue sin dibujar una solución a los problemas que experimenta el servicio de autobuses y la empresa que lo gestiona. Si bien, algunas dificultades ya se venían arrastrando de antes -el servicio se presta en la actualidad sin un pliego de contratación en vigor que establezca cuáles son las condiciones ya que el último venció en 2019 sin posibilidad de ser prorrogado nuevamente-, la llegada de la pandemia y sus consiguientes restricciones de movilidad que ha generado han agravado la situación hasta tal punto que la plantilla estuvo a punto de ingresar solo el 50% de sus nóminas ne la última mensualidad. Una situación que solo evito el rescate en forma de asignación presupuestaria por parte del Gobierno de la Ciudad.
En este sentido, desde la UGT se suman a las reclamaciones de Caballas (2019), CCOO y PSOE, que instan al Gobierno de la Ciudad a municipalizar la empresa para garantizar el mantenimiento y la calidad del servicio de transporte urbano que el Ejecutivo local está obligado a proporcionar a la ciudadanía. Así, el sindicato recuerda que «ya por el año 2009 UGT dió un paso adelante confeccionando un informe sobre el transporte colectivo de viajeros en Ceuta, llegando a la conclusión de que era necesario defender la municipalización de este servicio, entendiendo que el mismo debe basarse en un modelo sostenible, eficiente, de calidad y que suponga una alternativa real al uso del automóvil».
Asimismo, el sindicato considera que «no debe haber intermediario entre la administración y la ciudadanía, evitando así el beneficio económico a costa de la calidad del servicio» y defiende que «con la municipalización del servicio el uso del transporte privado disminuirá a favor de un mayor y mejor empleo del transporte público colectivo«.
Finalmente, UGT cree que este servicio público «debe ir acompañado por un nuevo diseño territorial del transporte colectivo, para llegar a todos los rincones, conectar zonas inaccesibles, ser eficientes y, así mismo, adaptarnos al cambio climático con un mayor uso del transporte colectivo en contra del vehículo privado, más contaminante y generador de mayores conflictos en la ciudad, como atascos, accidentes o estrés».