El joven de 25 años, ha tenido que ser trasladado al Hospital Universitario en la mañana de este sábado, tras ser interceptado por la Guardia Civil después de haber logrado sortear la valla de Marlaska, junto a otro chico, que también ha sido atendido en Urgencias del HUCE tras recibir atención sanitaria del ERIE de Cruz Roja, porque parecía estar inconsciente. Después de la crisis migratoria, la diplomática entre España y Marruecos se mantiene, los intentos de entrada y salida de la ciudad autónoma, no cesan
Dos jóvenes, uno de ellos de 25 años de edad, han tenido que ser trasladados al Hospital Universitario de Ceuta (HUCE) tras conseguir saltar el vallado que separa Marruecos de Europa. Según las fuentes consultadas, el joven, de origen subsahariano, presenta una lesión en el talón izquierdo que no ha requerido ningún tipo de intervención quirúrgica, ya que no hay ninguna rotura tras la realización de varias pruebas, pero que debe mantener en reposo y con algunos calmantes, hasta volver a ser revisado por el Servicio de Traumatología.
Del otro joven que le acompañaba no ha trascendido el estado de salud, pero según ha podido saber El Foro de Ceuta, se encontraba inconsciente cuando el ERIE de Cruz Roja llegó a la zona donde la Guardia Civil los había interceptado tras llegar a Ceuta.
Una vez dados de alta de observación del Hospital, según denuncian las ONGs, los migrantes mayores de edad se encuentran con el problema de que no tienen donde alojarse, ya que en las naves del Tarajal tan solo se recibe a los menores de edad que deben guardar cuarentena debido a la situación sanitaria. Los mayores de edad, en muchos casos, deciden ir al CETI y «probar suerte» para ser acogidos en el centro.
La explicación a esta situación, muy criticada por las organizaciones dedicadas a luchar por los derechos humanos, puede ser la saturación en la que se ha visto sumida la Ciudad tras la crisis migratoria. A día de hoy aún no están claros los protocolos a seguir tras la llegada de migrantes mayores de edad, por lo que estos se encuentran en un «limbo legal«, que deriva en que la gran mayoría de ellos acaben viviendo en las calles de Ceuta.
La crisis diplomática entre España y Marruecos se mantiene
Desde el Gobierno español se plantea dar un paso hacia la «reconciliación» entre los dos países, ya que según publica El País, Marruecos «no contesta a las llamadas de las autoridades españolas para resolver la situación de los menores en Ceuta o las temporeras en Huelva. El Gobierno estudia hacer un gesto que desbloquee la situación y evite una nueva escalada de la tensión. Puede ser la visita de un ministro o una llamada de Felipe VI«.
Aunque Marruecos no ha reaccionado a la salida de Ghali de España hacia Argelia tras su puesta en libertad por parte de la Audiencia Nacional, tal y como se temía, después el último comunicado de la casa real marroquí en el que amenazaba nuevamente a España anunciando el «derecho de dar, en su momento, respuestas adecuadas a las acusaciones infundadas del gobierno español», la presión en el vallado entre las personas que quieren volver a su país y las que quieren llegar a Europa no cesa.
Las concertinas fuera de España, pero presentes en Marruecos
La valla que construyó Marlaska ya no tiene concertinas, los últimos tramos fueron retirados a principios de 2021, aunque la obra comenzó en 2019. La retirada de las concertinas de la frontera española fue un Plan aprobado por el Consejo de Gobierno para eliminar los elementos «lesivos» y «cruentos», sin embargo, Marruecos construyó una valla con triple concertina en su territorio, a escasos metros del vallado español.
Además, el Plan de Interior contemplaba la elevación de algunos los tramos hasta los 10 metros de altura con rodillos fijos, se colocaron mallas anti-trepa y peines invertidos en otros, que hacen que el intento de salto siga siendo peligroso, tal y como se ha podido comprobar esta mañana, cuando dos jóvenes que han saltado la valla han tenido que ser trasladados al Hospital Universitario.