El Teatro del Revellín cogerá el próximo 4 de diciembre ‘Cenicienta siglo XXI’, una nueva versión de la obra que llevará a las tablas la compañía Teatro de Malta y en la que se intercambiarán los roles de los personajes del cuento clásico
La Consejería de Educación y Cultura pondrá a la venta mañana lunes las entradas para la obra familiar Cenicienta siglo XXI, que se representará en el Teatro Auditorio del Revellín el próximo 4 de diciembre a las 19.00 horas.
El precio de las localidades oscilará, en función de su ubicación (patio, palco y visibilidad reducida) entre los 4 y los 8 euros para adultos y de 2 a 6 euros para niños y se podrán adquirir tanto en online, en la página www.ceuta.es como en la taquilla del auditorio.
El planteamiento de la nueva versión, a cargo de la compañía Teatro de Malta, es interpretar La Cenicienta sin alterar los hechos del cuento clásico, pero subvirtiendo los roles de género establecidos en él. Así, el príncipe es bondadoso, sensible, soñador y necesitado de un rescate, y la Cenicienta es fuerte, inteligente, independiente, resuelta y de firme carácter. Así mismo, le se le da al príncipe dos primos que serían el reflejo masculino de las hermanastras.
A pesar de esta alteración de estereotipos, la producción ha mantenido sin dificultad el romanticismo que cabe en cualquier enamoramiento, y el elemento mágico simbolizado por el hada madrina, encarnada en esta versión por una mujer con una profesión y, por tanto, con una vida independiente, de la cual es plenamente dueña.
En Cenicienta siglo XXI, un grupo de clowns musicales irrumpen en el escenario e interpretan el cuento como el gran espectáculo que a ellos les parece que es. Entre escenas e interpretaciones musicales, van desgranando los hechos del relato hasta el momento posterior a la fiesta, en el que ella, en vez de esperar, abandona su casa decidida a compartir sus pesares. Ahí nos desvelan que en esa aventura Cenicienta se cruzó con la troup, se unió a ellos y rescataron al príncipe. Desde entonces hasta hoy, aquí y ahora, se dedican a cambiar los cuentos porque cambiando los cuentos se puede cambiar el mundo.
