El nuevo anuncio por parte de Marruecos de mantener cerrada la frontera al menos hasta el 10 de septiembre ha supuesto un nuevo golpe para las personas transfronterizas atrapadas en Ceuta. Esta misma mañana otro marroquí intentaba volver a su país a nado por el espigón del Tarajal, pero ha sido interceptado por un agente de la Guardia Civil
Desde el cierre del paso fronterizo entre Ceuta y Marruecos hace cinco meses se ha vuelto habitual el intento de muchos marroquíes atrapados en nuestra ciudad de regresar a su país a nado a través del espigón del Tarajal o de Benzú. Una práctica que en la mayoría de los casos ha sido frustrada por agentes de la Guardia Civil que patrullan la zona precisamente para impedir esta ‘huida’ al país vecino.
Esta crisis migratoria a la inversa se hace cada día más patente, la desesperación crece entre las personas transfronterizas que tienen su hogar al otro lado de la frontera y que ahora se ven abocados a vivir en una nave en el polígono del Tarajal. Marruecos se niega a la repatriación de la totalidad de las personas bloqueadas, hasta el momento y hace ya varios meses se produjeron hasta tres ‘pasillos humanitarios’ y alrededor de 200 personas consiguieron que sus nombres apareciesen en los listados que les permitía el paso de vuelta a su país.
La nave del Tarajal, que la Ciudad Autónoma habilitó para acoger a cerca de 100 personas, se ha convertido en escenario de disputas y peleas entre las personas que lo ocupan y cada día que pasan fueras de sus hogares se encuentran en una situación de extrema vulnerabilidad.
El vídeo al que ha tenido acceso El Foro de Ceuta muestra cómo la necesidad de volver a su país pesa más que el fuerte oleaje de levante y el joven marroquí intentaba pasar a nado, hasta que un agente de la Guardia Civil se ha acercado hasta el borde del espigón para hacerle regresar. Una patrullera del Servicio Marítimo se ha acercado también hasta la zona. Según explica Instituto Armado a este medio, hay varias personas que lo han intentado en diversas ocasiones.