Así han vivido los vecinos y vecinas de Benzú el intento de llegar a Europa de 300 personas migrantes de origen subsahariano. El intento de entrada ha sido contenido por Marruecos. En el vídeo, además de duras imágenes, se pueden escuchar los gritos, llantos y palos que han recibido los migrantes en suelo marroquí. Organizaciones defensoras de los derechos humanos lo han repetido en innumerables ocasiones: «Marruecos hace el trabajo sucio de Europa” en la contención de migrantes de sur a norte.
Sobre las 05:00h de la madrugada de este sábado la Guardia Civil desplegaba varias unidades por el perímetro fronterizo ante la llegada de dos jóvenes migrantes que intentaban llegar a suelo europeo. En Marruecos, la policía desplegaba también más de cien efectivos para contener a unas 300 personas que intentaban cruzar a Ceuta.
Finalmente, sólo dos han conseguido pasar, uno por el agua a través del espigón de Benzú y otro que ha permanecido casi dos horas encaramado a la valla. Ambos han sido devueltos a Marruecos.
El nuevo Gobierno de PSOE y Unidas Podemos no se ha pronunciado todavía sobre las devoluciones producidas en la mañana de este domingo, pero Pedro Sánchez se comprometió a eliminar estas prácticas y Unidas Podemos propuso en el Senado una Proposición de Ley cuyo objetivo era poner fin a las ‘devoluciones en caliente’ Se trata de una práctica que ha sido condenada por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
«Marruecos no respeta los derechos humanos»
El vídeo demuestra cómo Marruecos no debe ser un socio seguro para España en materia de inmigración. Las organizaciones defensoras de los derechos humanos lo han repetido en innumerables ocasiones.
El pasado día 11 de diciembre, la Comisión Europea anunciaba su apoyo al país vecino con 101,7 millones de euros, destinados a “combatir la inmigración irregular y el tráfico de personas”, enmarcado dentro de un nuevo paquete de medidas de apoyo a distintos países al norte de África.
De estos 147,7 millones de euros, 101,7 millones serán destinados a “apoyar los esfuerzos de Marruecos para combatir el tráfico de seres humanos y gestionar la inmigración irregular, y aumentar la concienciación entre los jóvenes y sus familias sobre los riesgos que afrontan al tratar de cruzar el Mediterráneo”, según EFE.
Hace unos días explicábamos que de esta manera, la Unión Europea está pagando a un tercer país para que se haga cargo del fenómeno migratorio antes de que este llame a sus puertas. Algo que para las organizaciones de Derechos Humanos es una clara externalización de las fronteras. Ana Rosado, miembro del equipo investigador frontera sur del área de migraciones de la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (APDHA) explicaba a El Foro de Ceuta que “cada vez se recrudecen más esas maneras de externalizar las fronteras y del control migratorio”.
Desde las ONG’s que defienden los derechos humanos, siempre han defendido que Marruecos hace “el trabajo sucio de Europa” en la contención de migrantes de sur a norte, “Europa tiene ese discurso hipócrita, defiende los derechos humanos pero sigue haciendo acuerdos con países que no respetan los derechos humanos, esto no deja de ser una medida de presión hacia estos países, ya que a cambio de dinero Europa les pide que hagan un control migratorio y estos países necesitan ese dinero, por lo que aceptan”, explica Ana Rosado de la APDHA.
Por su parte, la Asociación Elin, ha denunciado tras estas últimas devoluciones en caliente practicadas por el Gobierno que «España mantenga y mejore sus relaciones con países donde la represión y el maltrato a las personas migrantes marca y, en ocasiones, acaba con sus vidas». Además señalan que «es injustificable, según el derecho internacional humanitario, que España expulse a seres humanos a Marruecos, país que vulnera sistemáticamente sus derechos, sin saber si serán perseguidos por motivos de orientación sexual, identidad de género, motivos políticos, o cualquier otra circunstancia recogida en el Estatuto de los Refugiados»