La Guardia Civil arresta a dos jóvenes por agredir repetidamente a una anciana y su hijo en Torres de la Alameda
Una cámara oculta instalada por la Guardia Civil ha permitido detener a dos jóvenes por protagonizar un brutal ataque contra una anciana y su hijo en situación de vulnerabilidad en la localidad madrileña de Torres de la Alameda. Los arrestados, ambos de unos 20 años y de nacionalidad española, han sido imputados por un delito de odio motivado por aporofobia, además de varios delitos de lesiones y daños.
El vídeo captado por los agentes revela una escena estremecedora: los agresores, armados con botellas de lejía y recipientes de cristal, se acercan de madrugada a la vivienda deteriorada donde residen las víctimas. Sin mediar palabra, arrancan los cartones que sustituyen los cristales de las ventanas y arrojan el contenido corrosivo directamente sobre los rostros de los moradores. A continuación, insultan y lanzan botellas de cristal contra ellos, causando heridas y destrozos.
Según fuentes del Instituto Armado, los ataques no eran aislados. La madre y su hijo llevaban tiempo sufriendo acoso, aunque nunca lo denunciaron por miedo. Fue tras un pequeño incendio en la vivienda, el pasado mes de junio, cuando se activó un dispositivo de vigilancia que permitió registrar los hechos y actuar.
En una de las grabaciones más impactantes, se observa cómo los agresores abren la puerta a patadas e introducen un palo de gran tamaño con el que intentan golpear a las víctimas. En otra secuencia, la anciana es atacada cuando caminaba hacia su domicilio: los jóvenes le lanzan botellas de cristal que impactan violentamente contra su espalda.
Las secuelas no tardaron en aparecer. El hijo sufrió daños en un ojo por la lejía, mientras que la mujer presentó contusiones considerables. A pesar de la crudeza de los hechos, la motivación exacta de los ataques aún no ha sido esclarecida, aunque todo apunta a un claro desprecio por la situación de precariedad de las víctimas.
Los detenidos, vecinos de la misma localidad, han comparecido ante la autoridad judicial, que ha decretado para ambos una orden de alejamiento de la vivienda y de las víctimas. La investigación continúa bajo la dirección del Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Arganda del Rey.
