En la última sesión de la Asamblea de Ceuta, Juan Sergio Redondo, portavoz del Grupo Político VOX, presentó una contundente propuesta que denuncia la creciente llegada de inmigrantes ilegales, a la que calificó de «invasión sin precedentes». Redondo criticó las políticas migratorias de la Unión Europea y los partidos locales, argumentando que estas facilitan el tráfico de personas y amenazan la seguridad y la cohesión social en España
Durante la última sesión de la Asamblea de Ceuta, el portavoz del Grupo Político VOX, Juan Sergio Redondo Pacheco, presentó una propuesta centrada en la creciente llegada de inmigrantes a España, la cual definió como una «invasión inmigratoria sin precedentes». Redondo comenzó su intervención agradeciendo al presidente y resaltando lo que considera una crisis migratoria que afecta no solo a Ceuta, sino a toda España y Europa. En su discurso, advirtió que esta situación representa un grave riesgo para la convivencia, la seguridad y la prosperidad de los ciudadanos españoles.
Redondo argumentó que la llegada masiva de inmigrantes ilegales es impulsada por una élite en Bruselas, que, según él, se ha enfocado en un modelo de inmigración descontrolada en lugar de fomentar la natalidad y apoyar a las familias trabajadoras españolas. Afirmó que las políticas actuales envían un «mensaje inequívoco» a los inmigrantes ilegales: que al llegar a Ceuta, serán trasladados a la península, lo que, según él, alienta a las mafias de tráfico de personas. Citó cifras alarmantes, indicando que, hasta el 15 de octubre de este año, más de 45,000 inmigrantes habían llegado ilegalmente a España, un incremento del 22,6% respecto al año anterior.
«El efecto llamada que han generado estas políticas ha hecho que las mafias del tráfico humano prosperen a expensas de vidas humanas», lamentó Redondo. Insistió en que esta «invasión» no solo pone en peligro la seguridad de los barrios, sino que también socava la cohesión social y el bienestar de los españoles. Además, criticó a los partidos que, en su opinión, ignoran la crisis y desinforman a la población, acusándolos de ser cómplices en la creación de una situación insostenible.
La propuesta de VOX incluye varios puntos, como la repatriación de inmigrantes ilegales, la declaración de Ceuta como región que no apoya a ONGs que, según ellos, colaboran con las mafias, y el impulso de una consulta popular sobre la situación migratoria en la ciudad. «Si realmente queremos acabar con la inmigración ilegal, debemos dejar claro que quien llegue de forma ilegal no podrá regularizar su situación», enfatizó Redondo, sugiriendo que el bienestar de los españoles debería ser la prioridad en las decisiones políticas relacionadas con la inmigración.
Sin embargo, la respuesta a su propuesta no se hizo esperar. La diputada Fatima Hamed, del Grupo Político MDyC, criticó fuertemente la intervención de Redondo, acusándolo de despreciar las propuestas que afectan a Ceuta y de reproducir un discurso que se aleja de la realidad. «Lo que usted propone es demagogia pura y dura», replicó Hamed, señalando que las afirmaciones de Redondo carecían de fundamento y que la situación de los inmigrantes debería abordarse con dignidad y respeto, independientemente de la postura política.
Alberto Gaitán, consejero de Presidencia y Gobernación, también se unió a las críticas, afirmando que el discurso de VOX fomenta el miedo y la desinformación. «No podemos permitir que la inmigración se convierta en un chivo expiatorio para desviar la atención de problemas más profundos», señaló. Gaitán instó a los miembros de la Asamblea a trabajar juntos para encontrar soluciones constructivas que respeten los derechos de los inmigrantes y reconozcan su humanidad.
A pesar del fervoroso apoyo de algunos miembros de su partido, la propuesta de VOX recibió un rechazo contundente. Con solo tres votos a favor frente a dieciocho en contra, la Asamblea dejó claro que la visión de VOX sobre la inmigración no contaba con el respaldo necesario para ser implementada. La votación se vio como un reflejo de la polarización en el debate sobre la inmigración, con partidos que abogan por enfoques más humanitarios y otros que priorizan la seguridad y el control fronterizo.
La sesión concluyó con un llamado a la unidad y la colaboración entre los diferentes grupos políticos, enfatizando la necesidad de encontrar un equilibrio entre la seguridad de los ciudadanos y el respeto por los derechos de los inmigrantes. A medida que la situación migratoria continúa evolucionando, queda claro que el debate en torno a la inmigración en Ceuta y en toda España seguirá siendo un tema candente en la política local y nacional.