El Parlamento Europeo ha aprobado este miércoles una resolución no vinculante en la que se insta a aumentar significativamente el gasto en Defensa dentro de la Unión Europea. La medida, que contó con el respaldo de populares, socialdemócratas, verdes y liberales, ha salido adelante con 419 votos a favor, 204 en contra y 46 abstenciones. Sin embargo, Vox ha votado en contra, argumentando que el plan no atiende las necesidades de seguridad en la frontera sur, especialmente en Ceuta y Melilla.
La resolución apuesta por un refuerzo del sector industrial y de innovación en Defensa, con medidas similares a las que se aplicarían en tiempos de guerra. Además, reitera el apoyo de la UE a Ucrania y pide que Bruselas ofrezca garantías de seguridad sólidas a Kiev. En este sentido, también se respalda la creación de una «coalición de voluntarios» liderada por Francia y Reino Unido para el envío de una fuerza de interposición en territorio ucraniano.
El argumento de Vox: seguridad en la frontera sur
En la Eurocámara, Vox justificó su rechazo señalando que, si bien están a favor del aumento del gasto en Defensa, no comparten la forma en la que se ha planteado este plan. «Una cosa es planificar un aumento de gasto para protegerse mejor y otra es hacer las cosas rápido y mal, sin transparencia y sin escuchar a los europeos y sus problemas reales», explicaron desde la formación. Además, subrayaron que la resolución «apenas menciona nuestra frontera sur, el terrorismo y los ataques híbridos a través de la inmigración masiva, como los sufridos en Ceuta y Melilla».
División en el Gobierno español
La votación ha evidenciado las diferencias dentro del Gobierno de España. Mientras que el PSOE votó a favor junto al PP y el PNV, sus socios de coalición, Sumar, Podemos, BNG, ERC y Bildu, se posicionaron en contra. Esta división refleja las discrepancias dentro del Ejecutivo de Pedro Sánchez respecto al incremento del gasto militar.
Además, en la resolución aprobada, el Parlamento Europeo ha criticado la postura de Estados Unidos, señalando que la Casa Blanca ha adoptado un enfoque demasiado permisivo con Moscú. Los diputados han pedido sanciones más duras contra Rusia y la confiscación de activos congelados para financiar la reconstrucción de Ucrania. También han instado a acelerar el proceso de adhesión de Kiev a la UE.