Un último tiro fallido de Kevin Punter valida el triunfo del Mónaco (85-84) en el partido y la eliminatoria
El FC Barcelona se quedó a un paso de la ansiada Final Four de la Euroliga tras caer por un ajustado 85-84 en el quinto y definitivo partido de su serie ante el Mónaco. La eliminación llegó de la mano de un último lanzamiento fallido de Kevin Punter, quien, con el tiempo agotándose, intentó asegurar el triunfo azulgrana, pero su tiro, desde una distancia forzada y sin apenas opción, ni siquiera tocó el aro. El sonido de la bocina marcó el final de un duelo emocionante, en el que el conjunto catalán luchó hasta el último segundo pero no pudo superar a un Mónaco que, gracias a su resistencia defensiva y su capacidad de reacción en momentos clave, selló su pase a la Final Four.
La eliminatoria comenzó de forma intensa, con ambos equipos sabiendo que solo uno podría seguir soñando con el título europeo. En un ambiente cargado de tensión en la Salle Gastón Médecin, los jugadores del Barça no se amilanaron ante la presión local. Satoransky y Anderson lideraron un inicio prometedor, con dos mates espectaculares y varios triples que dejaban entrever que el equipo de Pesic había llegado a la cancha monegasca dispuesto a luchar por su lugar entre los cuatro mejores de Europa.
Sin embargo, el Mónaco, con figuras como Mike James, el talentoso Diallo y el imponente Papagiannis, pronto demostró por qué ha sido un rival tan duro durante toda la serie. Aunque el Barcelona se mostró sólido en el primer tiempo, el equipo monegasco fue capaz de cerrar la primera mitad con una ventaja de 45-39, gracias a una gran actuación colectiva y a un rendimiento destacable de sus estrellas.
El tercer cuarto fue clave para ambos equipos. A pesar de las dificultades con las que se encontraba el Barça, incluyendo las lesiones de algunos de sus jugadores clave, el equipo azulgrana mantuvo la esperanza. Willy Hernangómez se destacó bajo los aros, y la energía de Anderson y Punter ayudaron a mantener la lucha por la victoria, que llegaba a su punto álgido con un marcador de 65-62 a favor del Mónaco.
En los últimos minutos, el Barça pareció tomar la delantera. Un triple de Brizuela y un espectacular rendimiento de Fall permitieron al equipo superar al Mónaco momentáneamente. Sin embargo, la respuesta del gigante Papagiannis fue fulminante, anotando dos triples cruciales y manteniendo la calma en los momentos más tensos del juego. La emoción subió a niveles insostenibles cuando Punter anotó un tiro que puso al Barcelona por delante (81-82), pero la réplica de James fue inmediata y efectiva.
Finalmente, con el marcador empatado y la pelota en manos de Kevin Punter, el último lanzamiento del partido se convirtió en el instante decisivo. El tiro de Punter no llegó a buen puerto, y con ello se selló la eliminación del Barça, que se quedó con las ganas de regresar a la Final Four y revivir los recuerdos de los años dorados de 2003 y 2010.
Así, el Mónaco avanza a la Final Four de la Euroliga, mientras que el Barcelona tendrá que esperar una nueva oportunidad en la próxima temporada. Un adiós doloroso para un equipo que peleó hasta el último segundo, pero que no logró superar la férrea defensa monegasca.
